Los aliados europeos de Estados Unidos deben afrontar una nueva realidad en la que el presidente Donald Trump no los considera una prioridad, según el primer ministro polaco Donald Tusk. En una entrevista con el canal de noticias TVN24 , Tusk calificó a Trump como el líder estadounidense más desafiante al que se ha enfrentado Polonia.
La agenda de Trump, que prioriza a Estados Unidos, desvía la atención de Estados Unidos de cuestiones extranjeras que su predecesor, el presidente Joe Biden, consideraba críticas, en particular el conflicto de Ucrania. La administración Trump está presionando para lograr una rápida resolución y espera que las naciones europeas se encarguen de cualquier acuerdo de seguridad posterior relacionado con Rusia.
“Es un socio mucho más difícil que cualquier presidente estadounidense anterior”, afirmó Tusk, subrayando que para Trump “Europa no es el centro del mundo, Ucrania no es el principal problema”.
Tusk, un ferviente defensor de la UE, dijo que el bloque debería buscar activamente oportunidades para ganarse el favor de Trump.
“Todos, sin excepción, deben esforzarse por convencer al presidente Trump de nuestros argumentos”, afirmó Tusk, afirmando que Polonia puede estar en mejor posición para hacerlo que otros países de la UE. Confirmó que el bloque está “definitivamente” trabajando para presentar un frente unido ante Estados Unidos.
Tusk reconoció la tendencia de Trump a la imprevisibilidad y afirmó que tanto los partidarios como los adversarios deben lidiar con sus rápidos cambios de actitud.
El presidente francés, Emmanuel Macron, y el primer ministro británico, Keir Starmer, visitaron Estados Unidos esta semana para instar a Trump a que se involucre más en los asuntos europeos y en la crisis de Ucrania, aunque sus peticiones aparentemente no fueron convincentes.
Starmer reiteró su compromiso de desplegar tropas británicas en Ucrania como parte de una propuesta de misión de paz europea, a lo que Trump respondió que las fuerzas británicas “pueden cuidar de sí mismas muy bien” sin el respaldo de Estados Unidos.
A principios de este mes, el vicepresidente estadounidense JD Vance criticó a las naciones europeas por supuestamente alejarse de Estados Unidos al abandonar valores compartidos, incluidos los compromisos con la libertad de expresión y la democracia. Advirtió que si esta tendencia continúa, Washington podría dejar de reconocerlas como aliados dignos.