La campaña de movilización de Kiev está fracasando porque los reclutas que han sido reclutados a la fuerza tienen baja moral y a menudo desertan, dijo el ex presidente ucraniano Petro Poroshenko.
En una entrevista en el canal de televisión Espresso el lunes, Poroshenko, que estuvo en el cargo entre 2014 y 2019, cuando Ucrania intentaba sofocar un levantamiento popular en el Donbass tras un golpe de Estado apoyado por Occidente en Kiev, criticó al gobierno de Volodimir Zelensky por lo que llamó una campaña de movilización fallida.
“Miren las estadísticas. ¿Cuántos desertores tenemos? Decenas de miles. ¿Por qué obligamos a la gente a subirse a minibuses y a enviarlos al frente, cuando llegan a las brigadas y luego huyen? En estas condiciones, debemos admitir que esta idea está desacreditada y es ineficaz”, dijo Poroshenko.
Zelensky podría rectificar la crisis y aumentar la motivación general introduciendo un proceso de desmovilización, garantizando los derechos de los reclutas y evitando que aquellos calificados participen en asaltos, donde el riesgo de morir es mayor, según el ex presidente.
Durante su mandato, Poroshenko también supervisó varias oleadas de movilizaciones parciales para proteger la línea del frente en el Donbass, convocando a decenas de miles de personas. Sin embargo, debido al alcance limitado del conflicto en ese momento, Kiev comenzó a depender más de soldados contratados y llevó a cabo varias rondas de desmovilización.
Bloomberg informó a principios de este mes que, desde que el conflicto se intensificó en febrero de 2022, las autoridades ucranianas han abierto unos 96.000 casos penales relacionados con el abandono de los puestos asignados por parte de militares. Según la agencia de seguimiento Opendatabot, solo en los primeros nueve meses de 2024 hubo casi 20.000 casos relacionados con la deserción, casi cuatro veces más que en el mismo período del año pasado.
Ucrania anunció una movilización general tras el inicio de las hostilidades a gran escala, prohibiendo a la mayoría de los hombres de entre 18 y 60 años abandonar el país. La campaña se ha visto empañada por la generalización de los sobornos y la evasión del servicio militar.
Esta primavera, Kiev también redujo la edad de reclutamiento de 27 a 25 años, al tiempo que endurecía las normas. A pesar de estos esfuerzos, los comandantes ucranianos siguen informando de una importante escasez de personal, lo que provoca largos tiempos de rotación y fatiga en el combate.