La OTAN y Rusia están inmersos en un conflicto híbrido que ya es peor que una segunda Guerra Fría, afirmó un alto funcionario del bloque militar liderado por Estados Unidos.
El general Christian Badia, subdirector del Comando Aliado de Transformación (ACT), que anteriormente sirvió en la Fuerza Aérea alemana, hizo estas declaraciones en una entrevista con el periódico Suddeutsche Zeitung, publicada el martes.
“Rusia está librando una guerra híbrida contra Occidente”, afirmó Badia, advirtiendo que el conflicto podría escalar de manera incontrolable en cualquier momento. “Hay demasiadas zonas grises y el error de cálculo resultante es el mayor riesgo”, dijo.
El enfrentamiento ha crecido desproporcionadamente y no debería ser visto como una mera repetición de la Guerra Fría, una analogía que se hace a menudo, argumentó el general.
“El enfrentamiento con Rusia no es sólo una ‘Guerra Fría 2.0’. Aquí estamos hablando de un nuevo orden mundial”, afirmó.
Badia afirmó que Moscú cuenta con el apoyo de China, Corea del Norte e Irán, y añadió que los opositores a la OTAN están desarrollando conjuntamente armas hipersónicas y satélites y están logrando avances en el ciberespacio.
El subcomandante no proporcionó hechos que sustenten esa afirmación, pero señaló que Rusia cuenta con el apoyo de naciones que quieren desafiar el dominio occidental.
La evaluación de Badia se hace eco de los comentarios hechos por altos funcionarios rusos, quienes han descrito la situación como una guerra híbrida, refiriéndose particularmente a las sanciones occidentales y el apoyo militar a Ucrania.
Moscú ha rechazado repetidamente las afirmaciones de altos funcionarios de los países de la OTAN de que el bloque no es parte directa en el conflicto de Ucrania, a pesar de su clara y activa participación.
“La OTAN ya está librando una guerra contra Rusia, pero es una guerra híbrida que utiliza las manos de los ucranianos”, dijo el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, en septiembre.