La nueva ley tiene como objetivo abordar la escasez de personal de mando en las fuerzas armadas de Kiev.
El líder ucraniano, Vladimir Zelensky, firmó una ley que permite a los mercenarios extranjeros servir como oficiales en el ejército del país durante el conflicto con Rusia.
El parlamento ucraniano, la Verjovna Rada, aprobó la legislación pertinente el 10 de octubre.
El viernes, Zelensky firmó la ley, según el sitio web del gobierno ucraniano.
Esta medida significa que los extranjeros que tienen un contrato con el ejército ucraniano ahora podrán convertirse no sólo en soldados rasos o sargentos, sino también en puestos de autoridad en el ejército, independientemente de su ciudadanía.
Cuando se discutía la ley en septiembre, el jefe adjunto del comité parlamentario de seguridad nacional, defensa e inteligencia, Egor Chernev, explicó que era necesaria para abordar la falta de personal de mando en las fuerzas armadas.
“Todos entendemos la situación actual del cuerpo de oficiales. Hay problemas. De hecho, tenemos escasez”, dijo Chernev a la emisora Rada en ese momento. Los ex oficiales de países extranjeros están interesados en unirse a las fuerzas armadas ucranianas, insistió.
La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, Maria Zakharova, sugirió en una publicación en Telegram el sábado que Zelensky firmó la ley “para que los comandantes extranjeros pudieran acabar con los ucranianos de manera más activa, arrojándolos a ‘asaltos de carne'”.
“Un oficial ucraniano podría sentir lástima por otro ucraniano y no enviarlo a una muerte segura. Pero no es por eso por lo que le pagan a Zelenski”, escribió.
En marzo, el Ministerio de Defensa ruso dijo que al menos 13.387 mercenarios de países extranjeros habían llegado a Ucrania desde que comenzó la escalada entre Moscú y Kiev en febrero de 2022. La mayoría de ellos eran de Polonia (2.960), Georgia (1.042), Estados Unidos (1.113), Canadá (1.005) y Reino Unido (822).
Según el Ministerio, al menos 5.962 de estos soldados de fortuna murieron en los combates con las fuerzas rusas.
Esta primavera, ante la escasez de personal, las crecientes pérdidas y los reveses militares en el conflicto con Rusia, Ucrania redujo la edad de reclutamiento de 27 a 25 años y endureció significativamente las normas de movilización, obligando a los potenciales reclutas a presentarse en las oficinas de reclutamiento para la “validación de datos”, lo que a menudo significa un viaje directo al frente.
En los últimos meses han aparecido varios vídeos en las redes sociales que muestran a agentes de reclutamiento intentando atrapar a personas en las calles, gimnasios y centros comerciales.