“El presupuesto de la UE no puede ser prisionero de los tipos de interés reduciendo nuestros programas”, dijo el destacado legislador Victor Negrescu, mientras los eurodiputados manifestaron una clara oposición a los recortes propuestos, preparando el terreno para tensas negociaciones sobre el presupuesto de la UE para 2025.
Los eurodiputados rechazaron el miércoles los recortes de 1.520 millones de euros propuestos por el Consejo Europeo a programas clave de la UE, como el programa de movilidad estudiantil Erasmus+ y el programa de investigación Horizonte Europa, y pidieron más financiación.
“Si recortamos el presupuesto, no podremos satisfacer [las necesidades de los ciudadanos]”, dijo el destacado eurodiputado Victor Negrescu (S&D/Rumania) a los periodistas en Estrasburgo, añadiendo que el presupuesto de la UE también necesita cierta flexibilidad para financiar acontecimientos imprevistos en los próximos años.
La votación plenaria confirmó la postura adoptada por el Parlamento para las negociaciones sobre el presupuesto final de 2025, que se llevarán a cabo durante las próximas tres semanas, con una primera reunión con representantes del Consejo y de la Comisión prevista para el 5 de noviembre.
Y es probable que las negociaciones se conviertan en una intensa batalla política entre el Parlamento y el Consejo sobre cómo pagar los tipos de interés de los fondos de recuperación pospandemia, que han aumentado considerablemente desde las estimaciones originales para 2021.
“El presupuesto de la UE no puede ser prisionero de los tipos de interés reduciendo nuestros programas”, argumentó Negrescu, mientras el Parlamento pedía que los fondos no utilizados del presupuesto plurianual de la UE se utilizaran para financiar las necesidades de los ciudadanos, en lugar de devolver el dinero a las capitales como es habitual.
Pero el Consejo, que representa a los Estados miembros y favorece la prudencia y la disciplina financiera, busca recortes en algunos programas de la UE, lo que para Negrescu es una propuesta de “austeridad”.
El Consejo no podrá aceptar todas las enmiendas del Parlamento a su posición si se votan, advirtió el martes a los eurodiputados Péter Banai, el ministro húngaro a cargo de las negociaciones presupuestarias, añadiendo que la UE necesita hacer una distinción clara entre “cuestiones más y menos importantes”.
“Lamentablemente, no he oído hablar de la fuente de financiación adicional. No son los Estados miembros, sino los contribuyentes europeos, quienes pagan el coste adicional de los gastos adicionales. ¿Queremos aumentar los impuestos? ¿Queremos aumentar el endeudamiento de la Unión Europea?”, preguntó a continuación al pleno.
El Parlamento y la Comisión están más cerca de llegar a acuerdos en materia de cohesión, agricultura, protección de fronteras, ayuda humanitaria y defensa, pero el comisario de Presupuesto saliente, Johannes Hahn, también reconoció que el Parlamento ha propuesto aplicar un gran número de programas.
“Será necesario establecer una clara priorización de las enmiendas presentadas, así como de las concesiones de ambas partes, y los debates deberían centrarse en aquellos programas en los que se puedan realizar ajustes significativos”, afirmó Hahn.
Con las posiciones de las tres instituciones claras, el Parlamento, la Comisión y el Consejo tendrán hasta el 18 de noviembre para alcanzar un acuerdo oportuno que pueda recibir luz verde a finales de año.