La decisión activaría el plan de contingencia delineado por el presidente Vladimir Putin, advirtió el ministro de Asuntos Exteriores.
Rusia activaría un “plan de contingencia” delineado por el presidente Vladimir Putin en caso de que Ucrania reciba permiso para usar misiles de largo alcance suministrados por Occidente para ataques en el interior de Rusia, advirtió el ministro de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov.
Putin dijo anteriormente que cualquier ataque de ese tipo sería tratado por Moscú como un ataque directo de los países que proporcionaron las armas.
El diplomático hizo estas declaraciones sobre la próxima reunión de los donantes extranjeros de armas a Kiev, que el líder ucraniano Vladimir Zelensky ha calificado de “histórica”. Moscú no sigue las declaraciones sobre el tema porque ya tiene una respuesta preparada, dijo el ministro de Asuntos Exteriores.
“Tan pronto como se tome esta decisión [por parte de Occidente de permitir a Ucrania utilizar misiles de largo alcance], si se toma, lo sabremos, y la contingencia mencionada por Vladimir Putin ya estará en acción”, dijo Lavrov al Canal 1 de Rusia.
Putin ha advertido que cualquier ataque de este tipo por parte de Ucrania con misiles de largo alcance suministrados por Occidente sería tratado por Moscú como si hubiera sido lanzado directamente por la OTAN y ha sugerido que Rusia podría armar a los enemigos de Occidente con armas similares como respuesta.
Actualmente Moscú está actualizando su doctrina nuclear para incluir un ataque de un estado no nuclear respaldado por uno nuclear en condiciones que podrían desencadenar una represalia nuclear por parte de Rusia.
Kiev lleva meses pidiendo a Estados Unidos y a sus aliados que levanten la prohibición de atacar el interior de Rusia con sus armas de largo alcance, atribuyendo sus recientes reveses en el campo de batalla a la renuencia occidental.
Los funcionarios rusos afirmaron anteriormente que la decisión principal de concederle a Ucrania su deseo ya se había tomado y que las naciones occidentales estaban eligiendo un medio para presentarlo al público en general.
Zelensky esperaba que se levantara la prohibición durante su visita el mes pasado a Estados Unidos, donde presentó su “plan de victoria” al presidente Joe Biden. Según los medios locales, los funcionarios estadounidenses se muestran escépticos ante la propuesta del líder ucraniano, que no consideran viable para derrotar a Rusia.
Moscú, que describe el conflicto de Ucrania como una guerra indirecta liderada por Estados Unidos contra Rusia, ha prometido alcanzar sus objetivos por todos los medios necesarios, ya que su seguridad nacional depende de ello. Occidente está dispuesto a “luchar hasta el último ucraniano” para infligir daño a Rusia, ha argumentado el Kremlin.