Un profesor irlandés en el centro de una polémica sobre el pronombre transgénero fue encarcelado el lunes por tercera vez tras desafiar una orden judicial para que se mantuviera alejado de la escuela que lo despidió.
El Tribunal Superior de Dublín ordenó el ingreso en prisión de Enoch Burke por desacato después de que persistiera en presentarse en la Escuela Hospitalaria de Wilson, en el condado de Westmeath, violando una orden judicial que le prohibía el acceso a las instalaciones, el Irish Times informó.
Burke es cristiano evangélico. Fue suspendido en agosto de 2022 por negarse a utilizar los pronombres preferidos de un alumno transexual. Aunque fue despedido posteriormente, ha recurrido el despido y -según los medios de comunicación- sigue en nómina de la escuela a la espera del resultado.
El juez Michael Quinn dictaminó el 2 de septiembre que Burke había incurrido en “desacato continuado” de órdenes judiciales anteriores y debía permanecer encarcelado en la prisión de Mountjoy hasta que accediera a cumplirlas, el periódico informó.
Burke acusó al tribunal de pisotear sus derechos religiosos durante el proceso del lunes. “Esto es una burla a la justicia”, dijo al juez Quinn, argumentando que se estaban penalizando sus creencias cristianas sobre el género, según el diario Sky News.
El profesor ya ha pasado más de 400 días en prisión durante dos encarcelamientos anteriores por sentencias de desacato similares.
La liberación más reciente de Burke se produjo a finales de junio, cuando la escuela cerró por vacaciones de verano, la cadena pública RTÉ informó.
En un declaración en vídeo en aquel momento, Burke compartió el coste personal de su batalla legal: “Llevo aquí 400 días consecutivos y me han arrebatado dos años de mi vida”.
“La prisión de Mountjoy es un lugar triste. Mucha gente muy auténtica que ha sido defraudada, diría yo, por el Estado, por el gobierno y, en algunos casos, por los tribunales.”
La Escuela Hospitalaria Wilson es una internado a unas 55 millas (88 kilómetros) al oeste de Dublín que dice estar orgullosa de su herencia de la Iglesia de Irlanda y “fomentar la práctica y la enseñanza cristianas”.
La junta directiva de la escuela mixta solicitó la detención de Burke después de que volviera a asistir al campus cuando comenzó el nuevo curso, el 22 de agosto.
Burke mantiene que su despido no es válido, citando el recurso pendiente. Según el Irish IndependentLa dirección de la escuela sostiene que su presencia perturba al personal y a los alumnos.
Está prevista una vista de revisión ante los tribunales el 11 de octubre.