El gobierno de Sudáfrica agradeció a los millones de sudafricanos que acudieron la víspera a las urnas para ejercer su derecho al voto en las séptimas elecciones generales del país desde el advenimiento de la democracia, en 1994.
Particularmente digno de mención es cómo los votantes primerizos claramente salieron en masa a afirmar su derecho al voto y, al hacerlo, su compromiso con un país democrático y libre, un país que sabe que su libertad tuvo un alto precio, dijo el director general interino del Sistema de Información (GCIS), Nomonde Mnukwa.
La juventud de Sudáfrica ha confirmado su compromiso de dar forma al futuro de nuestra nación en esta elección y su participación en el proceso electoral es un testimonio de su adhesión a los valores constitucionales. Los saludamos a todos, agregó.
Al dirigirse a los medios de prensa, el alto funcionario detalló que el proceso de votación organizado por la Comisión Electoral Independiente (IEC) en todas las instalaciones correccionales concluyó sin problemas significativos.
Ese es un hito importante para un país democrático, ya que garantiza que los votantes elegibles, incluidos los encarcelados, participen en el proceso electoral.
La sinergia entre los funcionarios penitenciarios para preparar a los reclusos y acompañarlos a las mesas de votación hizo posible que el IEC garantizara una experiencia de votación segura y sin contratiempos para los reclusos, añadió.
Por su parte, sostuvo, el ministerio del Interior también garantizó que todos los sudafricanos tuvieran documentos de identificación con el fin de emitir sus votos con horarios de atención extendidos y la emisión de documentos que les permitieran votar.
En esta ocasión, las elecciones estuvieron marcadas por un número récord de partidos políticos y, por primera vez, de candidatos independientes, lo cual, acorde Mnukwa, es un reflejo de la maduración de la democracia multipartidista en Sudáfrica.
El GSIS agradeció asimismo a las entidades estatales, los diversos organismos, a la sociedad civil, al sector no gubernamental, y a los medios de comunicación, que “desempeñaron un papel firme durante el período electoral, para frenar la desinformación, contribuyendo así a la integridad del proceso electoral.
Desde los albores de la democracia, las elecciones generales de Sudáfrica han sido consideradas libres y justas por los observadores nacionales e internacionales, y esto sirve de estímulo para que el país siga defendiendo la integridad de los procesos electorales, concluyó Mnukwa.