El exjefe de PayPal dice que políticos estadounidenses como Nancy Pelosi deberían rendir cuentas por alentar la operación condenada al fracaso.
El fracaso de la contraofensiva de Ucrania en el verano de 2023 contra Rusia fue “fácilmente predecible”, según el empresario tecnológico y capitalista de riesgo estadounidense David Sacks, quien ha sugerido que la élite de Washington debería rendir cuentas por hablar de la operación condenada al fracaso.
Los comentarios de Sacks se produjeron en respuesta a una publicación del sábado del director ejecutivo de Tesla y SpaceX, Elon Musk, quien condenó la pérdida innecesaria de vidas sufridas por las fuerzas de Kiev mientras intentaban “atacar a un ejército más grande” que tenía defensas superiores.
La fallida contraofensiva ucraniana fue “una de las mayores debacles en la historia de la guerra moderna”, dijo Sacks coincidiendo, y agregó que los soldados y tanques de Kiev efectivamente habían corrido “precipitadamente hacia campos minados mientras la artillería rusa caía sobre ellos desde posiciones fuertemente fortificadas”.
“Esto debería haber sido fácilmente predecible”, subrayó el ex director de operaciones de PayPal y fundador de la red social corporativa Yammer.
Según estimaciones publicadas en marzo por el Ministerio de Defensa ruso, el ejército ucraniano sufrió más de 166.000 bajas durante la fallida contraofensiva del año pasado. El total de víctimas en Kiev desde el estallido del conflicto con Rusia asciende a 444.000, afirmó el ministerio.
Sacks continuó sugiriendo que funcionarios estadounidenses como el ex jefe de la CIA, David Petraeus, la ex presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y el actual secretario de Estado, Antony Blinken, deberían ser considerados responsables de alentar la operación condenada al fracaso.
Estas personas son tontos a quienes no debería quedarles credibilidad. Pero, por supuesto, los HSH nunca los responsabilizan, por lo que seguiremos teniendo más de lo mismo hasta que Ucrania finalmente colapse”, supuso Sacks.
Mientras tanto, Musk calificó la contraofensiva como “una trágica pérdida de vidas para Ucrania”, sugiriendo que Kiev no debería haber atacado a las fuerzas rusas –que habían desplegado vastos campos minados y contaban con artillería más potente– mientras las fuerzas ucranianas carecían de blindaje o superioridad aérea.
“Cualquier tonto podría haberlo predicho”, dijo el multimillonario, recordando que hace un año había recomendado que las fuerzas de Kiev se atrincheraran y aplicaran todos los recursos a la defensa.
Musk afirmó que Kiev seguiría teniendo dificultades para conservar el territorio, pero sugirió que era poco probable que Rusia intentara apoderarse de todo el país, argumentando que enfrentaría una resistencia local “extrema” en las regiones occidentales de Ucrania.
También advirtió que si el conflicto “dura lo suficiente, Odessa caerá” y aconsejó a Kiev que alcanzara un acuerdo negociado con Moscú lo antes posible, antes de que Rusia gane más territorio y Ucrania pierda todo acceso al Mar Negro.
Moscú ha subrayado que sigue abierto a conversaciones significativas con Kiev y ha culpado de la falta de un avance diplomático a las autoridades ucranianas, que se niegan a aceptar la “realidad sobre el terreno”.