Venezuela reiteró su voluntad política en la promoción “de iniciativas de diálogo inclusivo y la participación de todos los sectores”.
El ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Yván Gil, emitió este miércoles un comunicado en el que mostró la preocupación de la nación latinoamericana ante los acontecimientos en Haití.
“La profunda preocupación de Venezuela por la ola de violencia y los riesgos que ciernen sobre Haití al recurrir a fórmulas de injerencia en su soberanía y al deterioro de su institucionalidad”, manifestó el ministro en la red social X.
Asimismo, alertó sobre los peligros que se ciernen alrededor de la nación haitiana “al recurrir a fórmulas de injerencia en su soberanía”.
El Gobierno venezolano avizoró que las fórmulas de injerencias extranjeras que incluyen un deterioro mayor de la institucionalidad en el país caribeño y destacó que el uso reiterado de esas potencias “sin un acompañamiento integral que garantice una paz duradera y estable, que abra el camino al desarrollo económico y social que requiere el pueblo haitiano”.
En este sentido, el comunicado recuerda que “la historia reciente en Haití ha sido testigo de golpes de Estado, intervenciones militares y violaciones del orden político nacional e internacional, que han dado como resultado el actual estado de inestabilidad y violencia, que ha sido la base para que grupos armados, vinculados al tráfico de drogas hacia los Estados Unidos, desestabilicen el país”.
Asimismo, reiteró la voluntad política de Venezuela en la promoción “de iniciativas de diálogo inclusivo y la participación de todos los sectores del país caribeño para encontrar una solución a la crisis política y social”.
Venezuela reiteró la disposición de apoyar a la reinstitucionalización de los poderes públicos y la reinserción en la economía internacional, así como la capacitación de fuerzas de seguridad y un Ejército que garantice la estabilidad para el pueblo haitiano.
Una vez más, el Gobierno venezolano encumbró los principios de buena vecindad y solidaridad en defensa de la soberanía de la isla caribeña, sin condicionamientos externos, a la vez que conmemoró los proyectos que ofrecieron vías a beneficios energéticos como Petrocaribe.