El juez Sebutinde argumentó que el caso contra Israel era político, no legal, y que la “intención genocida” no estaba probada.
El gobierno de Uganda se ha distanciado de la jueza Julia Sebutinde, representante de Kampala ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), después de que ella se opusiera a todas las medidas de emergencia solicitadas por Sudáfrica en el caso de genocidio contra Israel.
El viernes, la CIJ ordenó a Israel que tomara “todas las medidas a su alcance” para impedir actos que pudieran calificarse como genocidio contra los palestinos en Gaza, pero no llegó a pedir un alto el fuego total. De las nueve medidas provisionales solicitadas por Sudáfrica, seis fueron aprobadas por la abrumadora mayoría de 17 jueces del panel, incluido un juez israelí que votó a favor de dos. Sin embargo, la jueza Julia Sebutinde, que actualmente cumple su segundo mandato en la corte internacional, votó en contra de todas ellas.
“El fallo del juez Sebutinde en la Corte Internacional de Justicia no representa la posición del gobierno de Uganda sobre la situación en Palestina”, dijo el sábado Adonia Ayebare, representante permanente de Uganda ante la ONU, en X (antes Twitter).
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Uganda se hizo eco del mensaje, que emitió un comunicado que decía: “el Gobierno aclara categóricamente que la posición adoptada por la jueza Sebutinde es su opinión individual e independiente, y no refleja de ninguna manera la posición del Gobierno de la República. de Uganda”.
El ministerio afirmó la posición del gobierno de Uganda de condenar “la continua campaña militar israelí contra el pueblo palestino indefenso”, pidiendo “el fin inmediato de la agresión militar israelí y el asedio de la Franja de Gaza”, así como “rechazando cualquier transferencia y deportación forzosa individual o masiva”. de palestinos de los territorios palestinos ocupados”.
Sebutinde defendió su “opinión disidente” en el caso palestino, argumentando que Sudáfrica no ha demostrado que los actos supuestamente cometidos por Israel fueron realizados “con la intención genocida necesaria y que, como resultado, pueden caer dentro del alcance de la Convención sobre Genocidio”. Añadió que el meollo de la cuestión era fundamentalmente político, no jurídico.
La jueza de Uganda Julia Sebutinde, de 69 años, es la primera mujer africana en formar parte del panel de la CIJ. Según el Instituto para Mujeres Africanas en Derecho, ella proviene de un entorno modesto y nació cuando Uganda luchaba activamente para romper con el dominio colonial británico.
Recibió su licenciatura en derecho de la Universidad Makerere en 1977 y luego continuó su educación en Escocia, donde obtuvo una maestría en derecho de la Universidad de Edimburgo.
En 2009 obtuvo el doctorado en la misma universidad. Antes de ser elegida miembro de la CIJ, Sebutinde se desempeñó como juez del Tribunal Especial para Sierra Leona, período durante el cual presidió el juicio del ex presidente liberiano Charles Taylor por crímenes de guerra cometidos en Sierra Leona. Taylor fue declarado culpable de 11 cargos y posteriormente condenado a 50 años de prisión.