Al menos cuatro de cada 10 universitarios franceses considera necesario trabajar en paralelo a sus estudios para satisfacer demandas básicas de alimentación y alojamiento, revela hoy una investigación.
El estudio del primer sindicato del sector, la Federación de Asociaciones Generales de Estudiantes (FAGE), establece “la precariedad” como el principal factor del fracaso académico.
Detallada por la cadena Franceinfo, la pesquisa refleja que enfrentan dificultades tanto los educandos subsidiados como los que no reciben apoyo económico.
En cuanto a la alimentación, un 19 por ciento de los estudiantes entrevistados confesó que no come según sus necesidades.
Acostarse o estudiar con el vientre vacío no es tener las condiciones adecuadas, reaccionó ante el medio de prensa la vicepresidenta para Asuntos Sociales de la FAGE, Sarah Biche.
La investigación también saca a la luz los problemas de alojamiento, desde sus elevados precios hasta la distancia y la insalubridad.
A partir de estos resultados, el sindicato demanda respuestas como la disponibilidad de sitios accesibles para comer, la congelación de precios de alojamientos estudiantiles o la construcción de nuevos.