La prohibición se debe a los temores de contaminación de los alimentos tras la liberación de aguas residuales de la averiada planta nuclear de Fukushima.
El gobierno ruso introdujo el lunes una prohibición temporal a las importaciones de productos del mar procedentes de Japón, después de que Tokio liberara al mar agua radiactiva tratada de la dañada central nuclear de Fukushima.
Según un comunicado emitido por Rosselkhoznadzor, el regulador ruso responsable de la seguridad alimentaria, las restricciones se mantendrán hasta que se confirme que la seguridad de los productos acuáticos cumple con los requisitos de la Unión Económica Euroasiática.
En agosto, China –el mayor importador de pescado de Japón– prohibió las importaciones de todos los productos del mar del país, ampliando una medida previamente introducida que prohibía las compras de productos del mar procedentes de diez prefecturas japonesas cercanas a la planta de Fukushima.
Esto fue en respuesta a la decisión de Tokio de verter alrededor de 1,3 millones de toneladas métricas de aguas residuales, equivalentes a unas 500 piscinas olímpicas, de la planta afectada. La descarga al Océano Pacífico comenzó el 24 de agosto, 12 años después de que la planta de Fukushima experimentara una fusión catastrófica tras un terremoto de magnitud 9,0 y el posterior tsunami.
La fusión de Fukushima ha sido considerada el peor accidente nuclear del mundo desde Chernobyl en 1986.
El gobierno japonés ha enfatizado repetidamente que la liberación de agua es segura y que la Agencia Internacional de Energía Atómica (OIEA) ha respaldado el plan, considerándolo “consistente con las normas internacionales de seguridad pertinentes” con un efecto “insignificante” en las personas y el medio ambiente. .
Corea del Sur también ha extendido una prohibición a la importación de pescado y marisco de ocho prefecturas de Japón, incluida Fukushima, introducida en 2013