A dos años del secuestro en Estados Unidos del diplomático venezolano Álex Saab, el embajador de ese país en Bolivia, César Trómpiz, exigió su liberación en entrevista concedida a Prensa Latina.
“El caso de Saab se encuentra en un tribunal norteamericano que evalúa su condición de diplomático tras el doble secuestro de que fue objeto, primero en Cabo Verde, y después en Estados Unidos, donde permanece desde hace dos años tras su transportación ilegal”, afirmó Trómpiz.
Dijo a esta agencia de noticias el embajador que, a través de su sistema de justicia, Washington violó el Derecho Internacional abiertamente, la inmunidad diplomática de Saab y de Venezuela desde el primer momento de su secuestro en junio de 2020, y hoy se cumplen 24 meses del segundo por parte de Estados Unidos.
“Lo llevaron de Cabo Verde hacia ese país -reiteró Trómpiz-, y allí se encuentra incomunicado sin posibilidad de ver a su familia, sin adecuada atención médica pese a ser un paciente oncológico y sin la posibilidad real de ver rehabilitados sus derechos humanos y como diplomático acreditado por Venezuela”.
Comentó el embajador que, en este segundo año de secuestro, Venezuela mantiene su denuncia ante la opinión pública internacional y respalda al movimiento Free Álex Saab, extendido por el mundo con la exigencia de su libertad.
Añadió que, como parte de estos esfuerzos, en la 19 Muestra de Cine Latinoamericano y del Caribe en Bolivia (del 17 al 30 del mes en curso en la Fundación Cinemateca) se exhibirá el documental Alex Saab, un diplomático secuestrado, de la periodista y realizadora Karen Méndez.
“Ella vendrá para su presentación, y al propio tiempo realizará una gira académica y de medios en el contexto de esa visita”, anticipó.
La cinta aborda con una visión testimonial este hecho nunca antes visto en el mundo: la detención arbitraria y el posterior secuestro de un enviado especial del Gobierno de Venezuela.
“El único delito de Saab consistió en romper el unilateral bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos contra Venezuela al conseguir alimentos, medicinas y gasolina en momentos en que la Casa Blanca apostaba por asfixiar a todos los venezolanos con el objetivo de forzar un cambio de gobierno”, enfatizó Trómpiz.
Advirtió el diplomático que este caso constituye un grave precedente para la comunidad internacional, ocurrió en un contexto en que Washington de manera unilateral sancionó a 10 de las 12 navieras que llevaban alimentos, medicamentos y componentes para la industria petrolera venezolana.
Trómpiz subrayó que el trabajo de Saab permitió en ese momento crítico que el pueblo venezolano no muriera de hambre y por falta de medicamentos en medio de la pandemia de Covid-19, lo cual significó ganar tiempo para el país.
Añadió que por eso lo mantienen encarcelado en circunstancias inhumanas para quebrar su voluntad y la de sus defensores.
Trómpiz reiteró que hoy Venezuela se autoabastece con más del 90 por ciento de sus alimentos, entre otras cosas porque la gestión de Saab dio tiempo a realizar un cambio de matriz en este terreno.
Enfatizó en que su caso es una flagrante violación de la Convención de Viena que establece la inmunidad diplomática, y despierta la solidaridad de gobiernos y activistas de todo el mundo.
Enfatizó en que su caso es una flagrante violación de la Convención de Viena que establece la inmunidad diplomática, y despierta la solidaridad de gobiernos y activistas de todo el mundo.
“Ellos denuncian que, así como el imperio del Norte no perdona a Julián Assange la revelación de los crímenes de lesa humanidad de Estados Unidos en el Medio Oriente, a Álex Saab lo castigan ilegalmente porque rompió el bloqueo unilateral contra Venezuela”, concluyó el embajador.