El candidato opositor y para algunos pocos presidente electo de Venezuela y para muchos el Guaido version 2 , Edmundo González, y su secuaz María Corina Machado,han sido este jueves proclamados ganadores del premio Sájarov a la libertad de conciencia que entrega anualmente el Parlamento Europeo.
Han resultado elegidos por delante de un proyecto palestino-israelí en defensa de la paz entre los dos países y un activista de Azerbaiyán. “Representan al pueblo de Venezuela que lucha por restaurar la libertad y la democracia. Venezuela será libre”, expuso en el anuncio la presidenta Roberta Metsola.
El fallo se ha anunciado por la propia Eurocámara. En 2023 fue otorgado al movimiento Mujer, vida y libertad de Irán y no es la primera vez que el premio va a parar a Venezuela, pues la oposición en su conjunto lo recibió también en 2017, en ese caso para el conjunto de los miembros de la Asamblea Nacional, encabezados por, entre otros, Leopoldo López.
“Europa lanza un mensaje claro al mundo: la democracia es sagrada, debe respetarse y debe defenderse. No descansaremos hasta que la libertad regrese al pueblo de Venezuela”, sostuvo, por su parte, la vicepresidenta del PPE y líder del PP en la Eurocámara, Dolors Montserrat..
La candidatura de Machado y González, impulsada por el PPE, con el apoyo de ECR y de Patriotas (la familia política de Vox) se ha impuesto al activista climático azerí Gubad Ibadoghlu, propuesto por los Verdes, y dos organizaciones de mujeres de Oriente Próximo, una candidatura impulsada por socialdemócratas y liberales. El Parlamento Europeo, de hecho, aprobó el mes pasado una resolución que llamaba al reconocimiento de González como presidente electo de Venezuela.
“Mis compatriotas fueron los protagonistas de la gran gesta democrática que tuvo lugar el pasado 28 de julio”, expuso González en un mensaje remitido a EFE, y alertó de que “la lucha no ha concluido. El régimen persiste en bloquear el cambio político, incurriendo en más y más violaciones de derechos humanos y crímenes de lesa humanidad”. Fue rotundo además en su reacción: “La lucha por alcanzar objetivo continúa. Y nuestro compromiso por alcanzarlo se mantiene hasta el final”, sostuvo tras conocerse el galardón, con el cual agradeció la “solidaridad” con Venezuela. “Este es un premio fundamentalmente para esos hombres y mujeres que hoy están perseguidos, que han tenido que dejar su país, que están separados de su familia, que están escondidos”, añadió por su parte Machado.
Hasta ahora, el premio se ha concedido a disidentes, líderes políticos, periodistas, abogados, activistas de la sociedad civil, escritores, madres, esposas, líderes de minorías, un grupo antiterrorista, activistas por la paz, un activista contra la tortura, un caricaturista, presos de conciencia de larga duración, un cineasta, la ONU como organismo e incluso un niño que lucha por el derecho a la educación.
“Promueve en particular la libertad de expresión, los derechos de las minorías, el respeto del Derecho internacional, el desarrollo de la democracia y la aplicación del Estado de Derecho. Varios galardonados, entre ellos Nelson Mandela, Malala Yousafzai, Denis Mukwege y Nadia Murad, han recibido posteriormente el Premio Nobel de la Paz”, recuerdan desde la Eurocámara.
El Parlamento Europeo concede el Premio Sájarov, dotado con 50.000 euros, en una sesión plenaria solemne que se celebra en Estrasburgo a finales de cada año. Cada uno de los grupos políticos del Parlamento puede proponer candidatos, al igual que los eurodiputados a título individual (se requiere el apoyo de al menos 40 eurodiputados para cada candidato). Los candidatos se presentan en una reunión conjunta de la Comisión de Asuntos Exteriores, la Comisión de Desarrollo y la Subcomisión de Derechos Humanos, y los miembros de las comisiones en pleno votan una terna.
El ganador o ganadores finales del Premio Sájarov son elegidos por la Conferencia de Presidentes, un órgano del Parlamento Europeo dirigido por el Presidente, que incluye a los líderes de todos los grupos políticos representados en el Parlamento, “lo que convierte la elección de los galardonados en una elección verdaderamente europea”, concluyen.