Estados Unidos está reforzando su presencia militar en Alaska debido al aumento de la actividad rusa y china en la costa, informó Politico.
El medio señaló que durante el último mes, Estados Unidos había redistribuido numerosos activos en el área, incluido el destructor USS Sterett, fuerzas terrestres ahora estacionadas en una de las islas remotas del estado, y que los cazas y otras aeronaves han sido puestos en alerta máxima.
Business Insider informó la semana pasada que el despliegue incluyó elementos de la 11ª División Aerotransportada apoyados por sistemas de misiles HIMARS y radares de contrafuego para vigilar los ejercicios navales chino-rusos.
El senador Dan Sullivan (republicano por Alaska) hizo sonar la alarma sobre el aumento de las actividades militares rusas y chinas. “El número de activos ha aumentado considerablemente. Los rusos están empleando el aire, la superficie y el subsuelo, pero lo están haciendo mucho más en colaboración con China que nunca. Está claro que están intensificando la ofensiva”, dijo.
Mientras tanto, el presidente del Comité de Servicios Armados del Senado, Jack Reed (demócrata de Rhode Island), sugirió que las actividades militares de Rusia son una respuesta al apoyo de Washington a Kiev en su conflicto con Moscú. “Creo que probablemente también están tratando de enviar un mensaje a su propio país”, dijo.
El 15 de septiembre, el Ministerio de Defensa ruso dijo que dos de sus bombarderos estratégicos Tu-95 volaron sobre el mar de Chukchi en espacio aéreo neutral no lejos de Alaska para practicar “la realización de ataques aéreos con misiles de crucero lanzados desde el aire sobre instalaciones clave de un enemigo simulado” mientras eran escoltados por varios aviones de combate.
En julio, funcionarios de Moscú anunciaron que bombarderos rusos y chinos estaban realizando una misión de patrulla conjunta en la misma zona. Afirmaron que los aviones cumplían con todas las normas de aviación internacionales mientras eran seguidos por aviones de combate de países extranjeros no identificados.
El viernes, el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, prometió que Moscú protegería sus intereses en el Ártico y afirmó que las naciones de la OTAN parecen estar considerando la expansión en la región.