“Es más o menos obvio que la Franja de Gaza está habitada por palestinos”, dice el embajador de Francia ante la ONU.
Francia no apoyará el desplazamiento forzado de palestinos en la Franja de Gaza por parte de Israel, dijo el martes Nicolas de Riviere, representante permanente de Francia ante la ONU.
“Francia se opone al desplazamiento forzado de poblaciones. Eso es muy claro… No apoyaremos el desplazamiento forzado de personas”, dijo de Riviere a los periodistas.
“Es más o menos obvio que la Franja de Gaza está habitada por palestinos. Nuestro objetivo es que los palestinos puedan seguir viviendo allí en condiciones seguras y en buenas condiciones. Esa debería ser la prioridad”.
Sus comentarios se produjeron después de que funcionarios israelíes pidieran la “evacuación voluntaria” de los palestinos de Gaza e instaran a varios países a acoger a los palestinos del enclave.
De Riviere dijo que excluir a la gente de Gaza o recolonizar Gaza son “ideas descabelladas”, y añadió que es esencial poner fin a la operación militar y no atacar a los civiles.
“Los palestinos deberían poder vivir en paz en sus hogares y los bombardeos a civiles en la Franja de Gaza deberían terminar. Hospitales, escuelas han sido destruidas… Queremos que eso termine”, subrayó.
Dijo que el grupo palestino Hamás “está utilizando a la población civil como escudos humanos, se esconde en las escuelas”, y añadió: “Eso es cierto. Sin embargo, cuando haya dudas, no se deben bombardear las escuelas”.
Subrayando la necesidad de proteger a la población civil, de Riviere dijo que hay 2 millones de civiles en Gaza, no 2 millones de terroristas.
Israel ha lanzado implacables ataques aéreos y terrestres contra la Franja de Gaza desde un ataque transfronterizo de Hamas el 7 de octubre.
Desde entonces, al menos 22.185 palestinos han muerto y otros 57.035 han resultado heridos, según las autoridades sanitarias de Gaza, mientras que se cree que casi 1.200 israelíes han muerto en el ataque de Hamás.
El ataque israelí ha dejado a Gaza en ruinas, con el 60% de la infraestructura del enclave dañada o destruida y casi 2 millones de residentes desplazados en medio de una grave escasez de alimentos, agua potable y medicinas.