En los últimos 10 años él número de artesanos se redujo en Italia en unos 400 mil, pues aproximadamente uno de cada cuatro abandonó esa actividad, alerta hoy un informe.
Un reporte elaborado por la Oficina de Investigaciones de la Confederación General Italiana de Artesanos (CGIA) precisa que mientras en 2014 había 1,77 millones de personas en este país dedicadas a esas artes y oficios, el pasado año la cifra descendió a 1,37 millones, para una caída del 22,0 por ciento.
Según ese análisis, divulgado este sábado en el sitio digital informativo del canal televisivo RAI News, la disminución fue significativa interanualmente, pues entre 2023 y 2024 el número se redujo en 72 mil, para una baja de 5,0 puntos porcentuales.
Esa cañida estuvo motivada, entre otros factores, por un acelerado proceso de fusiones y adquisiciones que afecta a algunos sectores, así como a la falta de interés de muchos jóvenes por el trabajo manual, la carencia de una correcta planificación educativa, con una incapacidad para mejora y elevar la calidad de la orientación vocacional.
También incide, según los expertos, el envejecimiento progresivo de la población italiana que se refleja en los artesanos, con un insuficiente relevo generacional, además de la feroz competencia ejercida en las últimas décadas por parte del comercio minorista a gran escala, en particular el electrónico.
Se consideran otros factores, como el aumento de la carga burocrática y el incremento en los costos de los alquileres, sumados a un alza los impuestos nacionales y locales, que obligan a muchos artesanos a abandonar sus negocios.
Sin embargo, a pesar de esa tendencia general negativa, se aprecian positivos resultados en algunos sectores, particularmente en los relacionados con el bienestar y la informática, de ahí que se observa un aumento en el número de peluqueros, esteticistas, tatuadores, ingenieros de sistemas y expertos en redes sociales, entre otros trabajos.
Otra área con un buen rendimiento es la alimentaria, con resultados positivos para negocios como las heladerías y pizzerías con servicio a domicilio, especialmente en ciudades con alta potencialidad turística, añade el estudio.