Los aranceles y la política migratoria del presidente estadounidense Donald Trump están llevando la economía hacia una recesión, advirtió el analista jefe de Moody’s, Mark Zandi. Zandi describió a Estados Unidos como “al borde” de una recesión.
La advertencia se produjo tras un informe de la Oficina de Estadísticas Laborales que indica que Estados Unidos creó un promedio de tan solo 35.000 empleos al mes entre mayo y julio, menos de un tercio del ritmo del año pasado y el más bajo desde 2020. Los expertos afirman que la desaceleración indica un debilitamiento del crecimiento económico.
Otros indicadores también han sido desalentadores: el gasto de consumo en junio aumentó solo un 0,1% tras la inflación, los precios subieron un 2,7% interanual, el máximo desde febrero, y la actividad fabril se contrajo por cuarto mes consecutivo debido a la caída de los pedidos y el empleo.
“La economía está al borde de la recesión. Esa es la clara conclusión de los datos económicos de la semana pasada”, escribió Zandi en X el domingo. “El gasto del consumidor se ha estancado, la construcción y la manufactura se están contrayendo, y se prevé una caída del empleo”.
Advirtió que la inflación por encima de la meta deja a la Reserva Federal poco margen para reactivar el crecimiento, especialmente bajo las políticas de Trump.
“No es ningún misterio por qué la economía está en dificultades; la culpa es del aumento de los aranceles estadounidenses y de la política migratoria altamente restrictiva”, declaró Zandi. “Los aranceles están reduciendo cada vez más las ganancias de las empresas estadounidenses y el poder adquisitivo de los hogares estadounidenses. Menos trabajadores inmigrantes significa una economía más pequeña”.
Desde su regreso al cargo, Trump ha endurecido las restricciones a la inmigración ilegal y planea deportar a 4 millones de personas en cuatro años, una medida que muchos advierten que provocará una grave escasez de mano de obra. También ha impuesto aranceles a cientos de socios comerciales de EE. UU. , presentándolos como una estrategia “recíproca” para asegurar mejores condiciones comerciales, proteger el empleo, reactivar la industria manufacturera, reducir el déficit y financiar desgravaciones fiscales.
Zandi no es el único que advierte sobre los riesgos. El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, ha advertido que los aranceles podrían aumentar drásticamente la inflación y el desempleo.
El Instituto de Política Económica estimó que el plan de deportaciones masivas de Trump podría destruir casi 6 millones de empleos. La escuela Wharton de la Universidad de Pensilvania, alma máter de Trump, advirtió que las deportaciones reducirían los salarios de la mayoría de los trabajadores, reducirían el PIB y aumentarían aún más el ya enorme déficit presupuestario federal.