El operador japonés de la planta nuclear de Fukushima Daiichi, destruida por el tsunami, dijo que el inicio de la eliminación a gran escala de los restos de combustible derretido se retrasará varios años hasta 2037 o más tarde, el último revés que subraya los desafíos que tenemos por delante.
Tokyo Electric Power Company Holdings, o TEPCO, afirmó que necesitará de 12 a 15 años de preparación antes de iniciar la retirada a gran escala de los restos de combustible fundido en el reactor número 3. Dicha preparación incluye la reducción de los niveles de radiación y la construcción de las instalaciones necesarias dentro y alrededor del reactor.
En total, al menos 880 toneladas de combustible nuclear derretido se mezclaron con partes rotas de estructuras internas y otros escombros dentro de los tres reactores que sufrieron fusiones en la planta luego del terremoto y tsunami de 2011.
El retraso retrasa nuevamente el objetivo de 2051 establecido por el gobierno de Japón y TEPCO para el desmantelamiento de la planta.
La recuperación de prueba de una pequeña muestra de restos de combustible derretido en noviembre ya se realizó hace tres años, y algunos expertos estiman que el trabajo de desmantelamiento podría llevar más de un siglo.
TEPCO dijo que planea mantener el objetivo de finalización actual de 2051.
“Siendo realistas, somos conscientes de la dificultad (para lograr el objetivo), pero no abandonaremos el objetivo todavía, ya que aún no tenemos un cronograma de trabajo claro después de que comience el desmantelamiento a gran escala”, dijo Akira Ono, director de desmantelamiento de TEPCO.
Ono dijo que TEPCO planea examinar el trabajo de preparación necesario en los otros dos reactores dentro de los próximos dos años antes de la recuperación del combustible fundido a gran escala.
Después de pequeñas misiones de robots para recoger muestras, los expertos determinarán un método a mayor escala para retirar el combustible fundido, primero en el reactor nº 3.