Camboya y Tailandia acordaron un alto el fuego inmediato e incondicional con la mediación directa del presidente estadounidense Donald Trump. Así lo anunció el 27 de julio el primer ministro camboyano, Hun Manet, en sus redes sociales tras una conversación telefónica con Trump la noche del 26 de julio.
Según él, el líder estadounidense expresó su profunda preocupación por las pérdidas humanas del conflicto y reafirmó su compromiso con la paz. «No quiere ver ninguna guerra ni combate que provoque más muertes y heridos en ambos bandos», escribió Hun Manet, señalando que el presidente estadounidense tiene experiencia mediando en esfuerzos de paz en todo el mundo.
Durante la conversación telefónica, el primer ministro camboyano informó al líder estadounidense que Phnom Penh “está totalmente de acuerdo con la propuesta de un alto el fuego inmediato e incondicional entre las fuerzas camboyanas y tailandesas”.
Trump, después de hablar con el primer ministro interino tailandés, Phumtham Vechayachai, le dijo a Khun Manet que el gobierno tailandés también había aceptado la propuesta de alto el fuego.
El objetivo es implementar los principios acordados lo antes posible para evitar más pérdidas de vidas y sufrimiento entre militares y civiles”, declaró Hun Manet.
Para garantizar la rápida implementación de los acuerdos de alto el fuego, el primer ministro camboyano encargó a su viceministro y ministro de Asuntos Exteriores, Prak Sokhon, que se coordinara directamente con el secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, y su homóloga tailandesa, Marit Sangyampong.