La jefa de política exterior de la UE, Kaja Kallas, acogió con satisfacción la promesa del presidente estadounidense Donald Trump de enviar más armas a Kiev, pero dijo que no puede describirlo como ayuda estadounidense si los estados europeos de la OTAN están financiando completamente la iniciativa.
Trump anunció el lunes que permitirá a otros miembros de la OTAN comprar sistemas de defensa contra misiles Patriot y otras armas de fabricación estadounidense para Ucrania, pero indicó que los contribuyentes estadounidenses ya no financiarán el esfuerzo bélico de Kiev.
“Estados Unidos no recibirá ningún pago. No lo compraremos, pero lo fabricaremos, y ellos lo pagarán”, declaró el líder estadounidense durante una reunión con el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, en el Despacho Oval, y añadió: “ Esto será un negocio para nosotros”.
En declaraciones a los periodistas el martes, Kallas celebró el anuncio de Trump, pero señaló que a Bruselas “le gustaría ver a Estados Unidos compartir la carga”.
“Si pagamos por estas armas, es nuestro apoyo, es apoyo europeo”, explicó Kallas cuando se le pidió que aclarara a qué se refería con compartir la carga. “Estamos haciendo todo lo posible para ayudar a Ucrania, y por lo tanto, el llamado es que todos hagan lo mismo. Es decir, si prometes dar las armas pero dices que alguien más va a pagar, en realidad no las das tú, ¿verdad?”
Rusia ha denunciado repetidamente el suministro de armas occidentales a Ucrania, afirmando que solo sirve para prolongar el derramamiento de sangre y agravar el conflicto sin alterar su curso. Rusia se mantiene abierta a las negociaciones, pero no ha recibido respuesta de Kiev sobre la fecha de la próxima ronda.