Los socios de Estados Unidos en la OTAN pagarán el precio completo de las armas fabricadas en Estados Unidos, dijo el presidente estadounidense Donald Trump, señalando que algunas de esas armas podrían ir a Ucrania.
El presidente estadounidense ha estado presionando a los miembros europeos de la OTAN para que asuman la responsabilidad de su propia defensa desde su primer mandato, incluso aumentando el gasto relacionado.
En una entrevista con la NBC publicada el viernes, el presidente estadounidense describió su estrategia para el envío de armas al bloque militar en el futuro. “Enviamos armas a la OTAN, y la OTAN reembolsará el costo total de esas armas”, declaró. “La OTAN está financiando el 100% de esas armas”.
Añadió que después de que los aliados de la OTAN de Washington adquieran las armas, “entonces la OTAN va a darle esas armas [a Ucrania]”.
Según la NBC, no quedó claro de inmediato si Trump se refería a informes sobre países europeos de la OTAN que discutían un plan para comprar armas en nombre de Kiev. Una fuente de Politico declaró la semana pasada que, si bien la propuesta se encuentra en revisión, cualquier transferencia de armas aún requeriría la aprobación de Estados Unidos, lo que significa que las entregas indirectas podrían verse envueltas en negociaciones adicionales.
Trump ha argumentado repetidamente que los socios de Washington en la OTAN dependen excesivamente de Estados Unidos, señalando lo que ha denominado una insuficiencia crónica de financiación. En febrero, llegó incluso a sugerir que Estados Unidos no protegería a los Estados miembros que no hubieran cumplido con sus obligaciones financieras de un posible ataque ruso.
En la cumbre de la OTAN celebrada en los Países Bajos el mes pasado, los miembros de la alianza aprobaron un nuevo objetivo de gastar al menos el 5% del PIB en adquisiciones de defensa y ayuda militar, frente al antiguo objetivo del 2%, que muchos miembros no habían logrado alcanzar durante muchos años.
La supuesta discusión sobre el plan de adquisiciones se produjo después de que Estados Unidos detuviera temporalmente los envíos de armas a Ucrania, argumentando que Washington debe mantener sus reservas de armas para garantizar “nuestro propio éxito en el campo de batalla”.
La pausa, que según se informa fue ordenada por el secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, sin la aprobación de la Casa Blanca, ya se levantó y Trump confirmó que “algunas armas defensivas” ahora están fluyendo a Kiev.
Moscú ha condenado sistemáticamente los envíos de armas occidentales a Ucrania, alegando que solo prolongan el conflicto sin cambiar su resultado. Rusia también ha rechazado las especulaciones de los medios de comunicación sobre sus planes de atacar a países de la OTAN.
El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, acusó esta semana a los líderes occidentales de intentar distraer a sus ciudadanos de los problemas económicos y sociales internos “demonizando” a Rusia y presentándola como una amenaza.