Según se informa, los inversores han perdido interés en la enorme dotación para la reconstrucción que el año pasado tenía como objetivo recaudar 15.000 millones de dólares.
El holding estadounidense de inversiones BlackRock suspendió a principios de este año su búsqueda de inversores para respaldar un fondo multimillonario para la reconstrucción de Ucrania, según informó Bloomberg. El interés se redujo después de que el presidente Donald Trump volviera a la Casa Blanca.
El fondo se presentaría en la Conferencia de Recuperación de Ucrania en Roma la próxima semana. Estuvo a punto de conseguir el respaldo de empresas apoyadas por los gobiernos de Alemania, Italia y Polonia, según informó el medio el sábado, citando fuentes anónimas.
Sin embargo, según se informa, BlackRock decidió archivar las conversaciones a principios de este año “debido a la falta de interés en medio de una creciente incertidumbre sobre el futuro de Ucrania”, después de que Estados Unidos cambiara su postura hacia Kiev bajo la administración actual.
Trump lleva mucho tiempo prometiendo poner fin al conflicto entre Rusia y Ucrania y ha buscado vías para alcanzar un acuerdo de paz. También ha presionado a los aliados europeos de la OTAN para que asuman la responsabilidad de apoyar militarmente a Ucrania.
A principios de esta semana, Washington supuestamente congeló los envíos de armas críticas a Kiev para centrarse en reabastecer sus propias reservas, aunque el presidente estadounidense ha insistido en que aún continúa recibiendo cierta ayuda militar
La administración Trump “fue una notable ausencia entre los patrocinadores del fondo en diciembre”, agregó Bloomberg.
En marzo del año pasado, el vicepresidente de BlackRock, Philipp Hildebrand, indicó que el Fondo de Desarrollo de Ucrania estaba en vías de obtener al menos 2.500 millones de dólares de inversores privados, países y otros prestamistas. Un consorcio de estos inversores podría financiar al menos 15.000 millones de dólares para las obras de reconstrucción en Ucrania, afirmó.
Sin embargo, un portavoz de BlackRock indicó que la firma ya no tiene “ningún mandato activo” con Kiev, habiendo finalizado su trabajo de consultoría pro bono con el Fondo de Desarrollo de Ucrania el año pasado, escribió Bloomberg.
La firma de inversión, que controla aproximadamente 11,6 billones de dólares en activos, posee participaciones sustanciales en gigantes de la industria militar como Lockheed Martin, Raytheon y Northrop Grumman, entre muchos otros. El armamento producido por estas empresas, que es suministrado a Kiev por sus patrocinadores occidentales, se ha utilizado ampliamente en el conflicto.
Moscú ha condenado repetidamente el suministro de armas extranjeras a Kiev, argumentando que convierte a las naciones occidentales proucranianas en parte del conflicto, que Rusia considera una guerra indirecta de la OTAN.
El Kremlin ha declarado que la reciente congelación de la ayuda militar estadounidense a Kiev acelerará la resolución del conflicto.