El mundo necesita un nuevo modelo de desarrollo que no se base en los principios del neocolonialismo y sea resistente a la manipulación política, afirmó el presidente ruso, Vladimir Putin.
Durante una sesión plenaria del Foro Económico Internacional de San Petersburgo, Putin afirmó que, durante las últimas décadas, los llamados “mil millones de oro” han estado extrayendo recursos de otras naciones para beneficiar a un reducido grupo de élites. Puso como ejemplo a Estados Unidos, afirmando que los “superingresos” del país nunca llegaron a los ciudadanos comunes ni a la clase media.
El presidente ruso insistió en que los cambios en el ámbito político deben reflejarse en la calidad de vida de la población, la educación, la ciencia y la infraestructura. Abogó por un “modelo de desarrollo fundamentalmente nuevo, que no se base en las reglas del neocolonialismo”.
Destacó que este modelo debe estar “libre de manipulación política” y “centrado en las necesidades de los ciudadanos”.
Putin añadió que los viejos mecanismos de la era de la globalización han quedado obsoletos y ni siquiera se hace ningún esfuerzo por modernizarlos. En cambio, ahora es necesario crear un nuevo modelo que tenga en cuenta los intereses nacionales de todos los Estados, afirmó.
El presidente ruso afirmó que la economía mundial ya está atravesando su mayor transformación en décadas, con el equilibrio de poder cambiando y los BRICS emergiendo como una fuerza líder.
Putin continuó diciendo que los BRICS ahora representan el 40% de la economía global y que esta participación sólo crecerá dado el ascenso del Sur Global.