El desempleo aumentó al 7,9 por ciento en el primer trimestre en Argentina, el más alto desde 2020, y en el Gran Buenos Aires la subida fue peor, 9,1, reflejan hoy cifras oficiales.
Los números del Instituto Nacional de Estadísticas y Censo (Indec) que fijó la tasa de actividad laboral descendió a 48,2 por ciento desmiente al presidente Javier Milei quien ayer dijo que había récord de puestos trabajo.
Mientras desde el ejecutivo y firmas privadas a fines se propala que la economía muestra signos de reactivación, la realidad muestra otra cara: el desempleo sube, desaparecen más pequeñas y medianas empresas, el consumo no logra subir por la pérdida del poder adquisitivo al que contribuye las continuas alzas de los servicios (luz, gas, agua, transporte, entre otros) que encarecen la vida.
En esa línea, la tasa de informalidad laboral, que era del 40,8 por ciento en el primer trimestre de 2024, llegó a 42 por ciento en los primeros meses de 2025. Solo el 46 por ciento de las personas ocupadas tuvo empleo asalariado registrado en ese período. Es el nivel más bajo desde 2007, indicó el diario Ámbito Financiero.
A su vez, el Centro de Economía Política Argentina (CEPA) reportó que desde noviembre de 2023 a marzo de 2025 la política de férreo ajuste económico del gobierno de Milei provocó el cierre de 13 mil 862 empresas registradas y provocó la pérdida de 210 mil 971 puestos de trabajo formales.
CEPA analiza datos oficiales de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo, correspondiente al sistema de Seguridad Social para señalar que la cantidad de unidades productivas con trabajadores registrados disminuyó de forma notable: pasó de 512 mil 357 a 498 mil 495. Es decir, hay menos empresas que demandan empleo.
Transporte y Almacenamiento perdió tres mil 502 empleadores y se ubicó a la cabeza en la lista de los más perjudicados por la administración libertaria, ilustra CEPA.
Otros rubros también registraron retracciones importantes: Comercio al por mayor y al por menor, reparación de vehículos automotores y motocicletas, menos dos mil 165 empleadores; Construcción, menos mil 760; Actividades inmobiliarias, menos mil 673; Servicios profesionales, científicos y técnicos, menos mil 613, e Industria manufacturera, menos mil 347.
Como consecuencia, los puestos de trabajo formales durante esta etapa disminuyeron 2,14 por ciento; pasaron de nueve millones 857 mil 173 en noviembre de 2023 a nueve millones 646 mil 202 en marzo de 2025. Es decir, se destruyeron 210 mil 971 empleos registrados.
El fenómeno se completa ,señala CEPA con el crecimiento del monotributismo (trabajo por cuenta propia), que de dos millones 037 mil 762 en noviembre de 2023 subió hasta dos millones 112 mil 759 de trabajadores por su cuenta en el tercer mes de este año.
Las personas que integran este régimen no tienen acceso a bonos, el aporte jubilatorio es reducido y la inestabilidad laboral es una constante.