Como era de esperar, el Banco de Inglaterra mantuvo los tipos de interés sin cambios ante el creciente temor a que el conflicto entre Israel e Irán se intensifique e involucre a Estados Unidos. Esto probablemente dispararía los precios del petróleo e impulsaría la inflación del Reino Unido aún más por encima del objetivo.
Como se esperaba ampliamente, el Banco de Inglaterra (BoE) decidió el jueves mantener su tasa de referencia en un mínimo de dos años del 4,25%.
Esto ocurre a medida que crecen los temores de que el conflicto entre Israel e Irán se intensifique y que los aranceles estadounidenses alimenten aún más la inflación.
Seis de los nueve miembros del comité de política monetaria votaron a favor de mantener la tasa, mientras que tres de ellos consideraron adecuado recortarla.
El banco bajó su tipo de interés al 4,25 % en mayo, el cuarto recorte tras un agresivo período de ajuste en 2022-2023. El mercado espera más recortes en los próximos meses.
La tasa de interés de referencia del banco central determina cómo los bancos cambian sus tasas sobre ahorros y préstamos.
La inflación del Reino Unido, principal indicador que rige las decisiones del comité de política monetaria, se situó el miércoles en el 3,4%, muy por encima del objetivo del 2% del Banco de Inglaterra. Sin embargo, el aumento de precios se desaceleró ligeramente en comparación con la variación anual de precios registrada en abril, que se situó en el 3,5%.
La opinión predominante en el banco era que la inflación se mantendría elevada durante los próximos meses, pero comenzaría a desacelerarse hacia el próximo año.
Pero un aumento en los precios del petróleo, debido a la actual crisis geopolítica entre Israel e Irán, podría cambiar esto, ya que los precios de la energía se traducen en los costos de producción y transporte de todos los demás bienes.
“El riesgo para los precios de la energía claramente se ha intensificado y ha cobrado mayor importancia dados los acontecimientos en Medio Oriente”, dijo a AP Sandra Horsfield, economista de Investec.
La incertidumbre sobre el nivel de aranceles que impondrá el presidente estadounidense Donald Trump en todo el mundo también está nublando las perspectivas de los precios en todo el planeta.
“Aún estamos esperando que el impacto total de los aranceles de Donald Trump se refleje en los precios de los bienes. Nos acercamos al final de la pausa de 90 días en los aranceles recíprocos, y lo que suceda a partir de entonces es una incógnita”, declaró Lindsay James, estratega de inversiones de Quilter.
Añadió que, incluso con el acuerdo comercial entre Estados Unidos y el Reino Unido, la avalancha de aranceles a otros países probablemente también se sentiría de alguna forma en el Reino Unido. Esto será especialmente así si Europa, el mayor socio comercial del Reino Unido, se retira de la mesa sin un acuerdo.
Si bien centra su atención en los riesgos inflacionarios, el Banco de Inglaterra también debe considerar que el crecimiento de la economía del Reino Unido es lento y podría beneficiarse de tasas de interés más bajas. En abril, la producción económica se desplomó un 0,3% debido a la caída de las exportaciones a EE. UU. y al aumento de los costos para las empresas, incluyendo una subida de impuestos.
“Se espera que la economía del Reino Unido se estanque de nuevo en el segundo semestre, lo que acentúa la necesidad de recortar los tipos de interés”, declaró James. “Pero con los riesgos a nivel mundial no solo inciertos sino también sustanciales, el mantra de mantener los tipos ‘más altos durante más tiempo’ continuará”.