El Ejército israelí se alista hoy para demoler más de 100 viviendas en el campamento de refugiados de Jenin, norte de la ocupada Cisjordania, pese a las condenas de las autoridades palestinas por esa nueva violación.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) anunciaron anoche su decisión y distribuyeron mapas que mostraban las estructuras a ser destruidas.
Por su parte, la agencia oficial de noticias palestina (Wafa) reportó que la medida se ejecutará en un plazo de 72 horas.
Este año las FDI lanzaron varias operaciones de demolición en barrios de esa localidad, la última de las cuales se realizó en marzo, cuando destruyeron 66 casas, destacó la fuente.
Desde enero las ciudades de Jenin y Tulkarem, con sus respectivos campamentos de refugiados, son blanco de una masiva operación terrestre de las FDI, que causó numerosos muertos, heridos y graves daños materiales.
Según Wafa, solo en el campamento de Jenin fueron dañadas o destruidas desde entonces más de 600 viviendas.
El medio noticioso resaltó que este martes los militares continuaron por cuarto día consecutivo sus operaciones de demolición en la gobernación de Tulkarem.
Las excavadoras derribaron docenas de estructuras residenciales en los barrios de Balawneh y Akasha, en el campo de refugiados de Tulkarm, como parte del plan de la ocupación de demoler 106 edificios allí y en el vecino campamento de Nur Shams, subrayó.
Precisamente, el vicepresidente palestino, Hussein al-Sheikh, condenó esa política de destrucción, que consideró un nuevo crimen.
En su cuenta en la red social X, al-Sheikh señaló que esa decisión refleja un flagrante desprecio por el derecho internacional.
Los continuos ataques a los campos de refugiados no pueden justificarse bajo ningún pretexto y constituyen un intento sistemático de quebrar la voluntad de un pueblo que no renunciará a su derecho a la vida y a la dignidad, afirmó.
En similar sentido se pronunció el Consejo Nacional Palestino, que criticó el nuevo plan de demolición.
La medida constituye un crimen de limpieza étnica llevado a cabo por el gobierno de ocupación como parte de un plan sistemático de desplazamiento forzado, aseguró.