Cuatro soldados japoneses sufrieron heridas tras una explosión en una instalación de almacenamiento de municiones de guerra sin detonar en una base militar estadounidense en Okinawa, confirmaron el lunes las autoridades locales.
El incidente ocurrió mientras los soldados trabajaban en un sitio administrado por la prefectura de Okinawa para almacenar municiones antiguas descubiertas en toda la isla, sitio de una de las batallas más feroces de la Segunda Guerra Mundial.
Según las autoridades, los militares sufrieron lesiones en los dedos durante la explosión. No se dispuso de más información sobre la naturaleza de la explosión ni sobre el estado de las instalaciones de inmediato.
Las Fuerzas de Autodefensa de Japón dijeron que estaban investigando la explosión, que al parecer ocurrió en la base aérea de Kadena o cerca de ella.
En ese momento estaba operando en la zona una unidad especializada en la eliminación de bombas sin explotar.
Las SDF agregaron que se estaban realizando esfuerzos para determinar tanto la causa como la ubicación precisa del incidente.
Grandes cantidades de municiones sin explotar permanecen enterradas en todo Japón, especialmente en Okinawa, donde hubo intensos bombardeos estadounidenses durante los últimos meses de la Segunda Guerra Mundial.
Estos restos se descubren con frecuencia durante obras de construcción o excavación.
En octubre pasado, una bomba estadounidense detonó en un aeropuerto comercial del sur de Japón, creando un cráter de gran tamaño y obligando a la cancelación de docenas de vuelos.