Desde 2022, el comercio entre la UE y Ucrania se rige por un marco temporal conocido como Medidas Comerciales Autónomas (MCA). Introducidas tras la invasión rusa a gran escala, las MCA eliminaron todos los aranceles y cuotas a las exportaciones agrícolas ucranianas a la UE.
Esto ofreció un acceso vital a los mercados europeos para los productores ucranianos, especialmente para productos agrícolas como granos, maíz, huevos y aves de corral, sosteniendo la economía del país en tiempos de guerra.
Sin embargo, el plan ATM expirará mañana (5 de junio) y no puede renovarse, ya que fue extendido una vez.
A pesar de los esfuerzos realizados desde fines de 2024, la Comisión Europea no ha logrado asegurar un reemplazo permanente o mejorado, lo que ha dejado a los exportadores ucranianos y a los responsables de las políticas de la UE en dificultades.
Este retraso ha frustrado a varios Estados miembros de la UE, muchos de los cuales esperaban que la Comisión lograra un acuerdo sostenible con Ucrania antes de que expirara el plazo.
El momento político no ayudó: la Comisión se enfrentó a una presión considerable para evitar inflamar las tensiones internas, particularmente en Polonia, donde los agricultores han protestado contra la afluencia de importaciones ucranianas.
Ahora que ya han pasado las elecciones presidenciales de Polonia, Bruselas espera que las negociaciones para un marco comercial de más largo plazo puedan finalmente avanzar.
Se restablecen los aranceles
¿Qué sucederá cuando expire el régimen de exención de aranceles? La consecuencia más inmediata es la reintroducción de aranceles a los productos agrícolas ucranianos.
En términos prácticos, esto restablece las condiciones comerciales entre Ucrania y la UE a la situación anterior a la invasión rusa de 2022, con las líneas arancelarias y las cuotas de la era anterior al ATM restablecidas.
Según funcionarios ucranianos, esto podría costar al país más de 3.000 millones de euros anuales en pérdidas de ingresos por exportaciones.
Como ya casi hemos llegado a la mitad del año, los límites de cuotas se aplicarán sobre una base de siete doceavos para el resto de 2025, lo que refleja proporcionalmente la ventana de tiempo reducida.
El impacto será significativo. En 2024, casi el 60 % de las exportaciones totales de Ucrania se destinaron a la UE, frente a poco más del 39 % en 2021, antes de la entrada en vigor de los acuerdos de libre comercio.
El libre acceso a los mercados de la UE ha sido un pilar de la resiliencia económica de Ucrania durante la guerra, ayudando a estabilizar los flujos de divisas y sostener la financiación pública.
Esto también tendrá consecuencias para el esfuerzo bélico de Ucrania
La pérdida de acceso preferencial al mercado no es meramente un inconveniente económico: podría tener consecuencias directas para la capacidad de Ucrania de financiar su esfuerzo bélico.
Vitalii Koval, ministro de Política Agraria y Alimentación de Ucrania, destacó durante una reciente visita a Bruselas que la agricultura representa una proporción mucho mayor de la economía de Ucrania que en la UE.
Uno de cada cinco ucranianos trabaja en el sector agrícola y su desempeño influye directamente en los ingresos nacionales.
La diputada ucraniana Yevheniia Kravchuk advirtió que si no se logra una solución incluso parcial, el PIB podría caer un 1%, lo que tensionaría aún más las finanzas del país en tiempos de guerra.
Las empresas ucranianas han trasladado sus mercados a la UE. Si disminuyen las exportaciones, disminuyen los ingresos fiscales, los mismos impuestos que financian a nuestras fuerzas armadas, declaró a Euronews.
También se espera que la reintroducción de aranceles reduzca los precios al productor, aumente la incertidumbre del mercado y desaliente la inversión privada, obstaculizando los esfuerzos de recuperación y reconstrucción a largo plazo.
Una medida provisional mientras se negocia un nuevo acuerdo
Para evitar una interrupción repentina de los flujos comerciales, la Comisión Europea ha preparado medidas transitorias que se aplicarán tras la expiración de los plazos de transición. Estas fueron aprobadas discretamente hace dos semanas por los embajadores de la UE como medida de precaución, aunque aún no se han publicado todos los detalles.
Un portavoz de la Comisión describió las medidas transitorias como un “puente” para dar tiempo a una revisión más exhaustiva de la Zona de Libre Comercio de Alcance Amplio y Profundo (ZLCAP) entre la UE y Ucrania, que es el acuerdo comercial a largo plazo que sustenta las relaciones antes de los ATM.
De manera crucial, la Comisión ha declarado que el comercio futuro se basará en el DCFTA y no en una extensión de los ATM de emergencia.
Esto marca un cambio claro, que decepciona las esperanzas ucranianas de mantener el mismo nivel de acceso al mercado del que disfrutaban bajo el régimen libre de aranceles.
Las negociaciones para una ZLCAP revisada comenzaron formalmente con una reunión en Bruselas el lunes por la tarde. Si bien los detalles siguen siendo escasos, un portavoz de la Comisión afirmó que se espera mayor claridad en los próximos días.
Más temprano ese mismo día, los embajadores de la UE se reunieron para reafirmar la importancia de establecer relaciones comerciales predecibles y a largo plazo con Ucrania, garantizando al mismo tiempo la protección de los agricultores europeos, un grupo políticamente sensible en varios estados miembros.
“Es una decisión sumamente importante”, declaró el diputado Kravchuk. “Cuando oigo que, desde la invasión a gran escala, la UE ha gastado más en gas y petróleo rusos que en ayuda a Ucrania, y ahora hablamos de cortar el acceso económico, lo que significa que la economía ucraniana se contraerá en tiempos de guerra, entonces es una postura cuestionable, en lugar de una de colaboración”.