Durante un mitin en una acería, el presidente estadounidense anunció que duplicará los aranceles a las importaciones de acero. Posteriormente, anunció lo mismo para el aluminio. Se espera que la medida, que afectaría duramente a Europa, entre en vigor el 4 de junio.
En una rápida reacción a la medida, un portavoz de la Comisión Europea declaró por correo electrónico: Lamentamos profundamente el anunciado aumento de los aranceles estadounidenses sobre las importaciones de acero del 25% al 50%», informó la agencia de noticias Reuters, y añadió:
“Esta decisión añade más incertidumbre a la economía mundial y aumenta los costes para los consumidores y las empresas a ambos lados del Atlántico”.
Refiriéndose también a las actuales negociaciones comerciales transatlánticas, el portavoz dijo que “el aumento arancelario también socava los esfuerzos en curso para alcanzar una solución negociada” y afirmó que “la UE está preparada para imponer contramedidas, incluso en respuesta al último aumento arancelario de Estados Unidos”, si es necesario.
El presidente estadounidense afirmó que duplicar los impuestos sobre las importaciones de acero “fortalecería aún más la industria siderúrgica en Estados Unidos”.
En una publicación posterior en su plataforma Truth Social, el presidente estadounidense añadió que los aranceles al aluminio también aumentarán del 25 % al 50 %. Trump indicó que ambos aumentos entrarán en vigor el miércoles 4 de junio.
El anuncio llega después de días confusos en los que la Justicia dio fallos opuestos a la política aduanera de Trump, primero bloqueándola con una decisión del Tribunal de Comercio Internacional de Estados Unidos y finalmente dándole luz verde nuevamente, a la espera de una nueva decisión de un tribunal federal de apelaciones.
Inversión procedente de Japón
Trump habló el viernes en la planta Mon Valley Works-Irvin de US Steel en las afueras de Pittsburgh, Pensilvania, donde también discutió los detalles de un acuerdo que se está ultimando para la inversión de la japonesa Nippon Steel en la icónica acería estadounidense.
Sin embargo, Trump aclaró a la prensa tras su regreso a Washington que aún no ha aprobado el acuerdo. “Tengo que aprobar el acuerdo final con Japón, y aún no lo hemos visto, pero han asumido un compromiso muy importante y supone una inversión muy importante”, declaró.
Aunque Trump prometió inicialmente bloquear la oferta de la siderúrgica japonesa de comprar US Steel, cambió de rumbo y la semana pasada anunció un acuerdo para una venta parcial a Nippon Steel.
La compañía japonesa nunca afirmó haber cambiado su oferta anterior para comprar y controlar completamente US Steel, por 14.900 millones de dólares, aunque sí aumentó la cantidad que prometió invertir en plantas estadounidenses y garantizó que no despediría a nadie.
“Estamos aquí hoy para celebrar un acuerdo extraordinario que garantizará que esta histórica empresa estadounidense siga siendo una empresa estadounidense”, dijo Trump durante un mitin en uno de los almacenes de US Steel. “Seguirán siendo una empresa estadounidense, ¿lo saben, verdad?”.
El sindicato United Steelworkers dijo que estaba muy preocupado “por el impacto que esta fusión de US Steel con un competidor extranjero tendrá en la seguridad nacional, nuestros miembros y las comunidades donde vivimos y trabajamos”.
Según el índice de precios al productor del gobierno, los precios del acero han aumentado un 16 por ciento desde que Trump asumió la presidencia a mediados de enero.
En marzo de 2025, el acero costaba 984 dólares por tonelada métrica en Estados Unidos, mucho más que el precio en Europa (690 dólares) o China (392 dólares), según el Departamento de Comercio de Estados Unidos.
Entre los socios más afectados por el posible aumento de aranceles a estos materiales están la UE, que acaba de obtener un aplazamiento para julio del incremento de los derechos generales a las exportaciones a EEUU, y Canadá.
“Desmantelar cadenas de suministro transfronterizas eficientes, competitivas y confiables como las que tenemos en el sector del acero y el aluminio tiene un alto costo para ambos países”, comentó Candace Laing, presidenta de la Cámara de Comercio Canadiense.
El año pasado, Estados Unidos produjo aproximadamente el triple de acero del que importó, siendo Canadá, Brasil, México y Corea del Sur las principales fuentes de importación. Los analistas atribuyen el fortalecimiento de la industria siderúrgica nacional a los aranceles, que se remontan al primer mandato de Trump.
El destino de US Steel, que en su día fue la mayor empresa siderúrgica del mundo, podría pesar en las elecciones de mitad de período para el Partido Republicano en el siempre decisivo estado de Pensilvania y otros que dependen de la industria manufacturera.