El gran consumo, que agrupa tanto a fabricantes como a distribuidores. teme el impacto de un entorno geopolítico inestable como el actual en su negocio. Hasta siete de cada 10 empresas temen que afecte al comportamiento de los consumidores y a la cesta de la compra, como advierte el estudio ‘Pulso al sector del Gran Consumo’ presentado este martes dentro del 30º aniversario del Congreso AECOC de Estrategia Comercial y Marketing.
En concreto, los fabricantes y distribuidores que han participado en el estudio de AECOC, temen que un entorno internacional más volátil genere tensiones en las negociaciones comerciales debido a incrementos de costes y, sobre todo, mine la confianza de los hogares retrayendo la demanda. Un punto de vista en el que coinciden con el Banco de España que teme más una merma del consumo de las familias y de la inversión de las empresas, que al efecto directo de la guerra arancelaria de Trump.
De igual modo, no descartan subidas de precios ante la volatilidad de determinadas materias primas. Por todo lo anterior, consideran que deben ser más cautelosos en su planificación comercial a medio plazo y revisar las inversiones que están desarrollando a nivel de producto o canal. En concreto, hasta un 88% de las empresas ven muy importante invertir en lo que denominan como básicos. Es decir, en aquellas inversiones enfocadas a mejorar la eficiencia de su operativa.
Todo ello, en un momento en que la demanda se está recuperando tras un alza del 2% en 2024 y cuando esta actividad cerró el año pasado con un crecimiento del 4,4% hasta los 125.000 millones de euros. En el mismo estudio se destaca que, en el primer cuatrimestre del año, la tendencia positiva continuó con aumento en términos de volumen del 2,5%.
También con crecimiento en volumen generalizado en la mayoría de las categorías de los súper destacando categorías como los huevos (+8,4%), las verduras (+6%), la carne (+5,3%) y productos frescos como el pescado con un 3,2%. En el lado negativo las bebidas alcohólicas (-4,9%) y no alcohólicas (-0,7%).
Previsiones positivas para 2025 y 2026
En cualquier caso, este y otros desafíos como la dificultad para asegurar la estabilidad de las cadenas de suministro, se encuadran en un contexto en el que las previsiones son positivas para esta actividad.
También posibles reajustes en precios y costes por la carencia de una determinada materia prima, entre otros. Según los analistas de la patronal AECOC, el sector cerrará con un aumento de los ingresos del 4,5% este año y del 3,9% de cara a 2026, aunque con variaciones entre segmentos de productos.
De todas formas, según el ‘Pulso’ de AECOC, el sector del Gran Consumo se muestran optimistas respecto al cierre de este año: El 71% de los distribuidores y un 57% de los fabricantes prevén que el ejercicio concluya con crecimiento en sus negocios.
En concreto, el 83% de las compañías que han participado en el estudio prevén una evolución positiva en términos de valor, con alzas de entre el 4 y 5%, mientras que en menor medida, un 65% de las compañías que han tomado parte en el estudio, también anticipan un mejor desempeño en términos de volumen, con aumentos de entre el 1 y el 3%..
Preguntados por los formatos, los expertos de la patronal del Gran Consumo, apunta que los hipermercados están creciendo por debajo de la media mientras que los supermercados lo hacen por encima. Una situación que se reproduce en el canal online. Al respecto, detectan que dentro de los súper más pequeños se están produciendo un traslación desde canales más desorganizados como el pequeño comercio tradicional.
En este sentido, inciden en un aumento de las superficie comercial en los formatos más pequeños y un empequeñecimiento en aquellos que han venido disponiendo de mayor espacio. En cualquier caso, hablan de un consumidor cada vez más omnicanal.
Principales desafíos de fabricantes y distribuidores
Fabricantes y distribuidores señalan como sus principales desafíos las altas dinámicas de promociones y precios, seguido de la necesidad de anticipar los cambios en el consumidor y el incremento de la marca del distribuidor (o ‘marca blanca’), sobre el que el 78% de las empresas participantes creen que seguirá aumentando hasta alcanzar la mitad del mercado. De cualquier modo, un 75% de los que han participado en el ‘Pulso’ de AECOC prevén un incremento relevante de la actividad promocional en línea a seguir arañando cuota de mercado al competiddor.
Otros dolores de cabeza son los problemas de stock (‘roturas’) y las posibles contracciones en la demanda. En paralelo, un 47% de los participantes en el estudio coincide en una rebaja de los nuevos lanzamientos en el segundo semestre del año. Lo que se traduce en un descenso de la innovación.
Respecto al canal online, el 88% de los distribuidores estiman su cuota de mercado en este canal entre el 1 y 3% a cierre de este año, aunque un 33% hablan sin tapujos de un ligero crecimiento en este ámbito. Al respecto, la mitad de los fabricantes destaca que venden cada vez más a través de portales de comercio electrónico (Amazon, Alibaba…) y un 60% afirman que han aumentado su facturación en actores más tradicionales.
Lo que para los analisas de AECOC supone un cierto dinamismo dentro del canal y, al respecto, señalan varios aspectos como la mayor presión de las marcas del distribuidor, los cambios en el comportamiento del consumidor, la necesidad de una mayor eficiencia operativa y la integración en su actividad de tecnologías como la Inteligencia Artificial (IA).
En este sentido, cada vez más compañías son conscientes de su relevancia y el 54% de las encuestadas aseguran que se están preparando de forma activa para utilizarla en su actividad (por un 43% en 2024.