La Comisión Europea tiene previsto presentar una estrategia sobre la tecnología cuántica antes de lo previsto, en junio de este año, en un intento de impulsar la adopción de una tecnología que se considera capaz de producir avances en medicina y finanzas.
La Comisión comenzó a consultar sobre un plan a principios del mes pasado y originalmente tenía la intención de lanzar la estrategia en el tercer trimestre del año.
La propuesta tendrá como objetivo reforzar la soberanía tecnológica y la seguridad económica de Europa en el ámbito de las tecnologías cuánticas, incluidas la informática y la comunicación. Se prevé que inste a los Estados miembros a cooperar para implementar plenamente la Declaración Europea sobre Tecnologías Cuánticas, firmada la primavera pasada.
También exigirá la alineación de los principales programas de investigación y desarrollo y la puesta en común de recursos para evitar la fragmentación y la duplicación, y construir colectivamente infraestructuras cuánticas paneuropeas, como para la fabricación de chips cuánticos y plataformas especializadas para la computación, y garantizar un suministro estable de componentes críticos.
“La UE es fuerte en la investigación inicial, pero a menudo tiene dificultades para ampliarla, comercialización y alcance global”, dijo la Comisión al recopilar comentarios.
Además, dijo que la UE carece de capacidad industrial en áreas clave, como la producción de procesadores cuánticos y otros componentes de hardware.
Esta dependencia tecnológica plantea problemas de soberanía, en particular en lo que respecta a las vulnerabilidades de la cadena de suministro. Sin una base industrial sólida, la UE corre el riesgo de seguir dependiendo de proveedores externos para componentes críticos.
Audiencia
En su audiencia de confirmación, la comisaria de Tecnología de la UE, Henna Virkkunen, se comprometió a introducir una nueva estrategia para impulsar esta tecnología. Su carta de misión, redactada por la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, afirmaba que la UE debería intensificar los esfuerzos y la inversión en la próxima ola de tecnologías de vanguardia, incluida la computación cuántica.
El informe Draghi sobre competitividad, publicado a finales del año pasado, también afirmó que la computación cuántica tendrá un papel fundamental en los marcos digitales de próxima generación, con importantes implicaciones económicas y de seguridad.
Podría aportar hasta 850.000 millones de euros a la economía de la UE en los próximos 15 a 30 años, según su informe.