El director del Instituto de Investigación Gamaleya, Alexander Gintsburg, advirtió que la gripe aviar H5N1 se está propagando entre los gatos y podría transmitirse a los humanos, lo que podría desencadenar una pandemia mortal. Gintsburg afirmó que la amenaza es lo suficientemente grave como para justificar el desarrollo inmediato de una vacuna.
“[Un prototipo de vacuna] debería pasar por ensayos clínicos de fase I y II contra la cepa que muy probablemente comience a transmitirse no solo entre animales, sino también de persona a persona”, dijo Gintsburg a Izvestia el miércoles.
La institución estuvo detrás de Sputnik V, la primera vacuna registrada contra la Covid-19 del mundo.
Según Gintsburg, una mutación del H5N1 que permita la transmisión humana por el aire podría provocar una crisis peor que la viruela.
“La tasa de mortalidad es del 50-70%, y si se transmite por el aire, la viruela parecerá un juego de niños en comparación con lo que podría suceder después de una o dos mutaciones”, dijo.
Gintsburg dijo que Rusia necesita poder fabricar la vacuna rápidamente.
“Debería estar disponible un prototipo listo para ampliar la producción en tres o cuatro semanas y ponerlo a disposición del público”, añadió. Sin embargo, señaló que actualmente no existe un programa de este tipo.
A principios de mayo, investigadores de la Universidad de Maryland identificaron un aumento repentino de casos de gripe aviar en gatos domésticos. El estudio, basado en dos décadas de datos, detectó más de 600 infecciones en gatos en 18 países, con una tasa de mortalidad superior al 50 %.
“Los gatos domésticos son susceptibles a la [gripe aviar] y constituyen una vía potencial para la propagación zoonótica a los humanos”, advirtieron los investigadores, haciendo hincapié en los riesgos para las personas en contacto cercano con los animales durante los brotes.
Los gatos suelen contraer el H5N1 al consumir aves infectadas, productos avícolas crudos o leche no pasteurizada de ganado infectado. El estudio también destacó vías de transmisión desconocidas, incluyendo gatos domésticos sin exposición clara.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha notificado un total de 974 casos humanos confirmados de H5N1 en 24 países desde 2003. De estos casos, 470 resultaron mortales. Estos casos suelen estar asociados a la exposición directa o indirecta a aves de corral infectadas. El virus no ha alcanzado una transmisión sostenida entre humanos, pero las autoridades sanitarias siguen de cerca su evolución debido a su alta tasa de mortalidad y al posible riesgo de pandemia.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. (CDC) consideran que el riesgo para el público en general es bajo.