Grecia y Egipto han reafirmado su compromiso con una propuesta de conexión eléctrica submarina diseñada para transportar energía renovable desde el norte de África a Europa.
El primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, y el presidente egipcio, Abdel Fattah el-Sissi, renovaron el compromiso durante las conversaciones en Atenas, tras la firma de acuerdos de cooperación en múltiples sectores.
El cable, con una capacidad de 3.000 megavatios, se extenderá casi 1.000 kilómetros bajo el Mediterráneo oriental y cuenta con el respaldo de la Unión Europea, lo que lo hace elegible para recibir una importante financiación del bloque.
“Esto permitirá que tanto Grecia como Europa importen energía de bajo coste principalmente energía eólica, que se puede producir de forma muy competitiva y la exporten a Europa”, afirmó Mitsotakis.
Se espera que el proyecto, cuyo coste se estima en unos 4.000 millones de euros, esté operativo dentro de cinco años, según un ambicioso calendario establecido por ambos gobiernos.
Su objetivo es transmitir energía solar y eólica desarrollada explícitamente para el proyecto en Egipto, con participación del sector privado liderado por el Grupo Copelouzos de Grecia.
El Sissi destacó la importancia estratégica del proyecto.
“No se trata sólo de un asunto bilateral: es un proyecto regional estratégico, ya que crea un vínculo directo que se extenderá a Europa a través de Grecia”, afirmó.
“Contamos con el apoyo de la Unión Europea para esta importante iniciativa”.
La UE ha expresado un fuerte interés en ampliar las asociaciones energéticas con países no miembros para diversificar sus fuentes de energía y reducir su dependencia histórica de la energía rusa tras la incursón a gran escala de Ucrania en 2022.
Mitsotakis y el-Sissi también discutieron sobre seguridad regional, desafíos migratorios y formas de profundizar la relación de Egipto con la Unión Europea.
“Grecia es un firme aliado de Egipto, incluso en asuntos relativos a la relación de su país con la Unión Europea”, dijo Mitsotakis, subrayando el papel de Atenas en el fomento de vínculos más estrechos entre la UE y Egipto.
Las conversaciones en Atenas concluyeron con acuerdos para explorar una mayor cooperación energética, facilitar la expansión del empleo estacional de trabajadores egipcios en Grecia y mejorar la colaboración entre los sectores financiero, de defensa y cultural.