Estonia ha aprobado un proyecto de ley cuatrienal de financiación de defensa por 2.800 millones de euros adicionales para alcanzar los objetivos de capacidad de la OTAN. El nuevo gasto elevará al país báltico a un gasto medio en defensa del 5,4 % del PIB hasta 2029, frente a los niveles anteriores de alrededor del 3,4 %.
Tomamos una decisión histórica desde el punto de vista de la defensa nacional de Estonia. Nunca antes habíamos asignado tantos fondos adicionales a la defensa nacional en un solo año, declaró Hanno Pevkur, ministro de Defensa de Estonia.
“El año que viene, el gasto en defensa aumentará hasta aproximadamente el 5,4% del PIB, o más del 2% en un año, y se mantendrá allí durante bastante tiempo”, señaló Pevkur.
“El promedio de cuatro años también es del 5,4%, y esto nos dará la oportunidad de cumplir los objetivos de capacidad militar que hemos acordado en la OTAN”, añadió
La decisión del Gobierno de aumentar el gasto de defensa se traducirá en un aumento sustancial del número de capacidades, equipos y reservas militares, así como en más municiones para las Fuerzas de Defensa de Estonia (EDF).
El nuevo proyecto de ley incluirá, entre otros, más defensa aérea de mediano alcance, ingenieros adicionales, batallones de reconocimiento de largo alcance, capacidades de ataque de largo alcance, sistemas de comunicaciones modernos, mayores capacidades navales y personal adicional.
El jefe de la EDF, general Andrus Merilo, afirmó que la necesidad de reforzar la defensa de Estonia se debe al deterioro de la seguridad causado por la operación a gran escala de Ucrania por parte de Rusia. También mencionó el fortalecimiento de la capacidad operativa de Rusia como otra amenaza para Estonia.
Según Merilo, Estonia no solo debe alcanzar el desarrollo de capacidades del enemigo, sino incluso superarlo. La financiación adicional aprobada por decisión gubernamental se utilizará precisamente para ese fin.
“Nuestra situación en materia de política de seguridad nos coloca en esta situación, y para estar preparados para nuestras tareas, no solo debemos seguir el ritmo del desarrollo militar de nuestro adversario, sino, si es posible, al menos dar un paso adelante junto con nuestros aliados en los próximos años”, afirmó Merilo.
Los nuevos planes de Estonia llegan a pocas semanas de la próxima cumbre de la OTAN, prevista para los días 24 y 25 de junio en La Haya. También se producen después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, amenazara con desestabilizar la alianza si no se cumplen sus exigencias de una cifra revisada del 5%.
Trump había criticado previamente a los miembros de la OTAN por “aprovecharse” de Washington en materia de seguridad. El 47.º presidente estadounidense había afirmado que los aliados europeos no estaban invirtiendo en su defensa, dejándola en manos de la OTAN y, en general, de Estados Unidos.
También calificó de “patéticos” los objetivos del 2% acordados por los miembros bajo el mando del ex secretario general de la alianza, Jens Stoltenberg, y amenazó con retirar a Estados Unidos de la OTAN si los miembros no alcanzan un gasto de defensa de al menos el 5% del PIB.