India ha revocado las visas de todos los paquistaníes en el país y les ha ordenado que abandonen el país antes del 27 de abril. La medida se produjo en respuesta al ataque terrorista en el territorio federal indio de Jammu y Cachemira que mató a 26 personas e hirió a docenas.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de la India declaró el jueves que la medida incluye a los pakistaníes que se encuentran actualmente en la India para recibir tratamiento médico. Las visas médicas solo serán válidas hasta el 29 de abril de 2025. Todos los pakistaníes en la India deben abandonar el país antes de la fecha de vencimiento de su visa modificada.
Se recomienda encarecidamente a los ciudadanos indios que eviten viajar a Pakistán. También se recomienda a los ciudadanos indios que se encuentran actualmente en Pakistán que regresen a la India lo antes posible, declaró el ministerio.
La medida se produce un día después de que el Comité de Seguridad del Gabinete, presidido por el primer ministro Narendra Modi, decidiera una serie de medidas de represalia, incluida la expulsión de una docena de diplomáticos paquistaníes, el cierre de la frontera de Wagah-Attari entre las dos naciones y la suspensión del Tratado de Aguas del Indo de 1960 sobre el uso de las aguas del sistema del río Indo por parte de las dos naciones.
Islamabad anunció medidas recíprocas el jueves. También advirtió que responderá a los intentos de la India de detener el flujo de agua hacia Pakistán.
“Cualquier intento de detener o desviar el flujo de agua perteneciente a Pakistán según el Tratado de las Aguas del Indo, y la usurpación de los derechos de los ribereños inferiores será considerado como un acto de guerra y se responderá con toda la fuerza a través de todo el espectro del poder nacional”, según una declaración de la Oficina del Primer Ministro paquistaní, citada por el periódico Dawn.
Más temprano el jueves, Modi emitió una advertencia a los responsables del mortal ataque terrorista en el sur de Cachemira, en el que civiles, principalmente turistas de varias partes de la India, fueron asesinados a tiros por militantes.
Según se informa, el Frente de Resistencia, que se cree es una rama del grupo Lashkar-e-Taiba con sede en Pakistán, se ha atribuido la responsabilidad del ataque.
En un mitin en Bihar, Modi condenó el ataque y prometió una respuesta firme, afirmando que se haría justicia. “Le digo al mundo entero que India identificará, rastreará y castigará a todos los terroristas y a quienes los apoyan. Los perseguiremos hasta el fin del mundo”, declaró. “Haremos todo lo posible para garantizar que se haga justicia”.
India ha acusado durante mucho tiempo a Pakistán de permitir infiltraciones militantes a través de la Línea de Control, la frontera de facto que divide la región en disputa reclamada por ambos vecinos poseedores de armas nucleares, una acusación que Islamabad niega.