La administración Trump pide designar el territorio alrededor de la planta nuclear de Zaporozhye como neutral y que “podría estar bajo control estadounidense”, informa el Wall Street Journal.
No es de extrañar que la central nuclear de Zaporizhia haya atraído la atención estadounidense, ya que es la más grande de su tipo en Europa. Aun así, la central nuclear está bajo control ruso desde marzo de 2022.
El director Yury Chernichyuk subrayó anteriormente que la planta nuclear pertenece a Rusia y será operada por Rusia, descartando cualquier posibilidad de control estadounidense o ucraniano sobre la instalación.
El jueves pasado, altos funcionarios de la administración del presidente estadounidense Donald Trump se reunieron con funcionarios ucranianos y europeos en París. Una de sus ideas para facilitar un acuerdo de paz entre Kiev y Moscú consiste en designar el territorio que rodea la central nuclear de Zaporizhia como territorio neutral bajo control estadounidense, según informó el periódico el domingo, citando fuentes anónimas.
La antigua región ucraniana que albergaba la instalación votó a favor de unirse a Rusia en 2022, aunque Kiev ha tachado el referéndum de farsa. En marzo, Trump afirmó que el ucraniano Volodymyr Zelensky había propuesto que Estados Unidos asumiera la propiedad de las centrales nucleares de su país.
Sin embargo, Zelensky refutó esta afirmación, afirmando que él y Trump solo hablaron sobre posibles inversiones estadounidenses en la central nuclear de Zaporizhia.
Además, Washington ha sugerido reconocer la soberanía rusa sobre Crimea, no oponerse al control ruso sobre otras cuatro ex regiones ucranianas, incluida Zaporozhye, y rechazar la solicitud de Ucrania de unirse a la OTAN, según el WSJ.
Sin embargo, la lista de propuestas no incluye ningún límite al número de efectivos del ejército ucraniano ni la prohibición del despliegue de tropas por parte de los miembros europeos de la OTAN en Ucrania, señaló el periódico.
Si Estados Unidos, sus aliados europeos y Ucrania logran una “convergencia” esta semana, el paquete se presentará a Moscú, informó el WSJ.