El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, expresó su preocupación por el cumplimiento del doble mandato del banco central, ya que es probable que los aranceles impulsen la inflación y debiliten el crecimiento económico. Sus comentarios aumentaron la presión sobre los mercados bursátiles y el dólar estadounidenses el miércoles.
El presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED), Jerome Powell, reconoció el miércoles que el banco central se enfrenta a un dilema creciente para cumplir con su doble mandato de estabilidad de precios y máximo empleo. En el contexto de una guerra comercial global cada vez más intensa, Powell advirtió que la escalada de aranceles podría impulsar la inflación y, al mismo tiempo, socavar el crecimiento, lo que complicaría la toma de decisiones sobre las tasas de interés.
“Podríamos encontrarnos en un escenario difícil en el que nuestros objetivos de doble mandato entren en conflicto”, declaró Powell en un discurso preparado para el Club Económico de Chicago. “Si esto ocurriera, consideraríamos cuán lejos está la economía de cada objetivo y los posibles diferentes horizontes temporales en los que se anticipa que se cierren esas respectivas brechas”.
Con el aumento de los gravámenes a las importaciones y el deterioro de las relaciones comerciales globales, se prevé un aumento de la inflación, aun cuando el crecimiento económico y la fortaleza del mercado laboral se ven presionados. La reducción de los tipos de interés impulsaría la actividad económica, pero también podría impulsar la inflación, mientras que un aumento de los tipos podría frenar aún más el crecimiento, que ya se encuentra en desaceleración.
Powell, sin embargo, reafirmó que la estabilidad de precios sigue siendo la principal prioridad de la Fed:Nuestra obligación es mantener las expectativas de inflación a largo plazo bien ancladas y asegurarnos de que un aumento puntual del nivel de precios no se convierta en un problema de inflación persistente», declaró. Sin estabilidad de precios, no podemos lograr los largos períodos de condiciones laborales sólidas que benefician a todos los estadounidenses.
Si bien no dio ninguna señal clara sobre el momento de cualquier cambio de política, Powell dijo: “Por el momento, estamos bien posicionados para esperar una mayor claridad antes de considerar cualquier ajuste a nuestra postura política”.
Wall Street se desploma mientras el oro alcanza un nuevo máximo
Los comentarios de Powell redujeron la probabilidad de un recorte de tasas de la Fed en junio, lo que agravó la ola de ventas en los mercados bursátiles estadounidenses, ya presionados por el desplome de Nvidia el miércoles. El Nasdaq Composite, con una fuerte presencia tecnológica, cayó un 3,07%, el S&P 500 un 2,24% y el Dow Jones Industrial Average un 1,73%.
El dólar estadounidense se debilitó aún más y el índice del dólar cerró por debajo de 99 por primera vez desde marzo de 2022. El euro superó los 1,14 en las últimas operaciones antes de que el par EUR/USD cayera ligeramente a 1,1369 a las 5:23 am CEST.
El sentimiento se estabilizó algo durante la sesión asiática del jueves, con los futuros de acciones estadounidenses recuperándose y el dólar repuntando modestamente.
Mientras tanto, los precios del oro alcanzaron nuevos máximos históricos, ya que los inversores buscaron refugios seguros. Los futuros del oro en Comex subieron un 3,3%, hasta los 3.351 dólares por onza, mientras que el oro al contado subió un 3,5%, hasta los 3.339 dólares por onza, a las 4:46 a. m. CEST.
La decisión del BCE en el punto de mira
Las declaraciones de Powell se produjeron apenas unas horas antes de la decisión sobre política monetaria del Banco Central Europeo (BCE), prevista para hoy. Se espera ampliamente que el BCE recorte los tipos de interés por tercera vez consecutiva este año. Dado que la inflación en la eurozona continúa disminuyendo, es probable que el banco central adopte una postura más expansiva para impulsar el crecimiento ante la creciente incertidumbre comercial mundial, en particular relacionada con las amenazas arancelarias de Estados Unidos.
La inflación anual en la eurozona se desaceleró al 2,2% en marzo, su nivel más bajo en cuatro meses. En comparación con la Fed, el BCE se enfrenta a menos restricciones para ajustar su política monetaria, en parte gracias al alza del euro, que ha ayudado a contener la inflación importada. El par EUR/USD ha ganado más del 9% desde finales de febrero, impulsado por los flujos de divisas hacia activos refugio.
Sin embargo, un tono moderado del BCE podría ejercer nueva presión sobre el euro, limitando potencialmente sus recientes ganancias frente al dólar.