Una poderosa tormenta azotó el lunes las islas griegas de Paros y Mykonos, provocando inundaciones generalizadas y obligando a las autoridades a cerrar escuelas e imponer la prohibición de todo tráfico, excepto los vehículos de emergencia.
Las fuertes lluvias en las principales ciudades de Paros, Parikia y Naousa (ambas populares destinos vacacionales), provocaron inundaciones que inundaron las calles, arrastrando automóviles y escombros más allá de los edificios encalados
Las autoridades de Paros dijeron que 13 personas atrapadas en la tormenta fueron llevadas por los bomberos a sus hogares, y agregaron que no se reportó a nadie herido o desaparecido.
En Mykonos, donde las inundaciones fueron menos intensas, se utilizaron excavadoras para abrir un camino y dejar pasar el agua por delante de cafés y restaurantes del paseo marítimo.
Las autoridades ordenaron el martes que las escuelas de Paros, Mykonos y otras dos islas del mar Egeo permanecieran cerradas, mientras que el servicio de protección civil envió alertas a los teléfonos móviles instruyendo a los residentes a permanecer en sus casas.
Equipos municipales y contratistas privados trabajaron para despejar las carreteras bloqueadas por rocas caídas, mientras los servicios de emergencia rescataban a los automovilistas varados.
Varias islas cercanas a Paros, en el grupo de las Cícladas, que se encuentra al sureste del continente en el mar Egeo, permanecen bajo alertas meteorológicas severas hasta el martes.
El Servicio Meteorológico Nacional ha emitido pronósticos actualizados de fuertes lluvias y tormentas eléctricas, que se espera que continúen hasta el miércoles por la mañana, afectando a las Islas Jónicas, las regiones continentales, Macedonia, Tracia, el Mar Egeo y Ática.
Se instó a los residentes de las zonas afectadas a permanecer atentos y seguir las pautas de seguridad oficiales en medio de la tormenta.