El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, ha dicho que gobiernos extranjeros anónimos están obstruyendo los esfuerzos para poner fin al conflicto de Ucrania, y atribuyó al presidente Donald Trump el liderazgo de las negociaciones para mediar en la paz entre Moscú y Kiev.
Altos funcionarios rusos y estadounidenses mantuvieron el lunes conversaciones maratónicas de 12 horas en Riad, Arabia Saudita, centradas en la resolución del conflicto en Ucrania y la garantía de la seguridad marítima en el Mar Negro. Sin embargo, ambas partes aún no han publicado detalles ni anunciado el resultado de las conversaciones.
Hablando durante una reunión de gabinete en la Casa Blanca antes de que concluyeran las conversaciones, Rubio enfatizó que el conflicto “necesita ser puesto fin” a través de negociaciones, no por medios militares, y elogió a Trump como “el único líder en el mundo que es capaz de llevar a dos partes a la mesa”.
Según Rubio, la iniciativa diplomática de Trump ha encontrado resistencia por parte de otros gobiernos, aunque no nombró a ningún país específico.
“Lo han logrado a pesar de los impedimentos de otros países y de quienes quizá tengan opiniones diferentes sobre cómo debería llevarse a cabo”, dijo Rubio, dirigiéndose directamente a Trump. “En última instancia, creo que la única posibilidad de paz que tenemos es mediante el liderazgo del presidente”
Tras una llamada telefónica entre el presidente ruso, Vladimir Putin, y su homólogo estadounidense la semana pasada, Moscú y Kiev acordaron un alto el fuego parcial y se comprometieron a suspender los ataques a la infraestructura energética durante 30 días.
Sin embargo, el Ministerio de Defensa ruso ha informado desde entonces de múltiples ataques ucranianos contra instalaciones energéticas rusas. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, ha subrayado que, a pesar de las violaciones de Kiev, Moscú seguirá manteniendo la tregua de los ataques energéticos.
En una entrevista el domingo, Peskov también comentó que, en lugar de buscar la paz y abordar las causas profundas del conflicto, los Estados miembros de la UE están debatiendo ahora el despliegue de contingentes de la OTAN en territorio ucraniano. Esta política militarista desenfrenada de Europa —no hay otra forma de describirla es difícil de comprender, declaró.
Las tensiones entre Washington y los miembros europeos de la OTAN resurgieron tras la toma de posesión de Trump en enero. El nuevo gobierno ha impulsado una rápida resolución del conflicto de Ucrania y planea transferir las responsabilidades de seguridad a Europa una vez que se establezca una tregua.
Tras una cumbre de emergencia celebrada en Londres a principios de este mes, el Reino Unido y Francia manifestaron su disposición a enviar fuerzas de paz occidentales a Ucrania una vez alcanzado el alto el fuego.
Moscú ha rechazado la propuesta, alegando que no importa el pretexto con el que entren las tropas de la OTAN en el país. El expresidente ruso Dmitri Medvédev advirtió que esto podría desembocar en una guerra directa entre el bloque militar y Moscú.