La Unión Europea ha rechazado la exigencia de Vladimir Putin de que se detenga completamente la ayuda militar a Ucrania en el marco de las negociaciones en curso para un alto el fuego, que el líder ruso sólo ha aceptado parcialmente.
Putin redobló su pedido durante una llamada telefónica con Donald Trump el martes, cuando aceptó detener los ataques contra la infraestructura energética, muy por debajo del amplio e incondicional alto el fuego que Estados Unidos y Ucrania respaldaron la semana pasada en Arabia Saudita.
“Se señaló que el cese total del suministro de ayuda militar e inteligencia extranjera a Kiev debe ser la condición clave para evitar una escalada del conflicto y avanzar hacia su resolución por medios políticos y diplomáticos”, declaró el Kremlin en el comunicado de la llamada telefónica.
Pero el jueves los líderes de la UE, salvo uno, rechazaron inequívocamente esa demanda.
En las conclusiones adoptadas durante una cumbre en Bruselas, los jefes de Estado y de Gobierno reafirmaron su compromiso de continuar con el suministro de armas y municiones para ayudar a las Fuerzas Armadas de Ucrania a resistir la invasión a gran escala de Rusia.
“La Unión Europea mantiene su enfoque de ‘paz a través de la fuerza’, que requiere que Ucrania esté en la posición más fuerte posible, con sus propias y robustas capacidades militares y de defensa como componente esencial”, se lee en el texto .
“Insta a los Estados miembros a intensificar urgentemente sus esfuerzos para abordar las apremiantes necesidades militares y de defensa de Ucrania”.
Antes de la cumbre, António Costa, presidente del Consejo Europeo, afirmó: «Seguiremos apoyando a Ucrania ahora, en futuras negociaciones y, especialmente, en tiempos de paz».
Las conclusiones sobre Ucrania fueron respaldadas como un “extracto” por 26 líderes, mientras que Viktor Orbán se negó, una vez más, a firmarlas.
El primer ministro húngaro ha dedicado las últimas semanas a criticar duramente la política de la UE sobre Ucrania, insinuando que la investidura de Trump la ha dejado obsoleta. Orbán critica abiertamente la asistencia militar a Kiev y, durante casi dos años, ha bloqueado por sí solo el reembolso a través de un fondo común de la UE de 6.600 millones de euros.
Ha amenazado en dos ocasiones con descarrilar la prolongación de las sanciones de la UE contra Rusia, cediendo solo en el último minuto .
Los funcionarios y diplomáticos en Bruselas se han acostumbrado a la oposición de Budapest y han recurrido al formato de “extracto” para permitir que los 26 mantengan un texto ambicioso, en lugar de optar por un lenguaje diluido que Orbán podría estar dispuesto a tolerar.
El texto aprobado el jueves saluda las aperturas diplomáticas de Trump y “llama a Rusia a mostrar una voluntad política real para poner fin a la guerra”, planteando el espectro de nuevas sanciones como una forma de “aumentar la presión” sobre el Kremlin.
Los 26 también se comprometen a apoyar “los esfuerzos de reforma de Ucrania en su camino hacia la membresía en la UE”, un objetivo que Orbán ha frenado con su poder de veto.
Durante su discurso virtual ante los líderes de la UE, Volodymyr Zelenskyy lanzó una crítica apenas velada a Hungría por su obstruccionismo.
“Es lamentable decir esto, pero también se necesita cierta presión dentro de Europa para garantizar que todo lo prometido se cumpla”, declaró Zelenski el jueves. “Es simplemente antieuropeo que una persona bloquee decisiones importantes para todo el continente o que ya se han acordado”.
“Los esfuerzos europeos que deberían aportar más seguridad y paz también se ven constantemente obstaculizados. Y creo que esto es un error”, añadió.
La exigencia de Putin de suspender por completo la ayuda militar también fue rechazada por Trump, quien, tras una llamada telefónica con Zelenskyy, prometió ayudar a Ucrania a encontrar sistemas de defensa aérea adicionales para proteger la infraestructura civil, “particularmente en Europa”.