Al menos 37 personas han sido detenidas en Turquía por publicaciones en las redes sociales que criticaban el arresto del alcalde de Estambul, Ekrem İmamoğlu, considerado ampliamente como el principal rival político del presidente Recep Tayyip Erdoğan.
İmamoğlu fue detenido el miércoles junto con otras 105 personas, entre ellas líderes empresarios, periodistas y otros políticos.
El gobierno turco afirma que el alcalde de Estambul está acusado de corrupción y de colaborar con un grupo terrorista. Sin embargo, él y sus partidarios creen que los cargos tienen motivaciones políticas.
El Partido Republicano del Pueblo (CHP), al que pertenece İmamoğlu, condenó su detención como “un golpe contra nuestro próximo presidente”.
Mientras tanto, İmamoğlu dijo poco antes de su arresto que “la voluntad del pueblo no puede ser silenciada”.
A pesar de la prohibición de manifestaciones durante cuatro días en Estambul, la gente salió a las calles el miércoles para protestar contra lo que considera un golpe a la democracia de su país.
Los críticos de Erdoğan también expresaron su frustración en las redes sociales.
El jueves, el ministro del Interior turco, Ali Yerlikaya, declaró que decenas de personas habían sido arrestadas por compartir lo que calificó de publicaciones en línea “provocadoras”. Afirmó que los mensajes incitaban al odio público o a la delincuencia.
La Fiscalía General de Estambul identificó 261 cuentas que habían compartido dichos mensajes y hasta el jueves se habían producido 37 arrestos.
İmamoğlu fue llevado a prisión pocos días antes de una elección interna del CHP, en la que debía ser nombrado candidato presidencial del partido.
El día antes de su arresto, la Universidad de Estambul anuló el diploma de İmamoğlu, citando irregularidades en su transferencia desde una universidad privada en Chipre en la década de 1990.
Dijo que la medida, que le impediría postularse a la presidencia, ya que todos los candidatos deben tener un título universitario, era “legalmente infundada”.
İmamoğlu se convirtió en el alcalde electo de la ciudad más grande de Turquía en marzo de 2019. El partido de Erdogan denunció irregularidades en los resultados e İmamoğlu ganó la nueva elección.
El alcalde mantuvo su cargo el año pasado, cuando su partido logró avances significativos en todo el país frente al partido gobernante de Erdoğan.
Algunos líderes internacionales han condenado la detención de İmamoğlu.
El canciller alemán, Olaf Scholz, dijo que su arresto era “deprimente para la democracia en Turquía, pero ciertamente también deprimente para la relación entre Europa y Turquía”.
“Sólo podemos pedir que esto termine de inmediato y que la oposición y el gobierno compitan entre sí, y no que la oposición sea llevada a los tribunales”, dijo.