La falta de viviendas asequibles se ha convertido en una de las principales preocupaciones de los ciudadanos de la UE, especialmente en España, donde los residentes de ciudades como Barcelona y Madrid afirman que los precios los están dejando fuera del mercado inmobiliario.
En las ciudades más grandes del bloque, uno de cada diez hogares gasta más del 40 % de sus ingresos en alquiler, según los últimos datos de Eurostat. En las zonas rurales, esta cifra se reduce al 7 %.
En este contexto, el aumento de los precios, la falta de oferta y el aumento de los alquileres turísticos dificultan el acceso a una vivienda digna en el bloque, especialmente para los jóvenes.
España en el punto de mira
Entre 2010 y el tercer trimestre de 2024, los precios de la vivienda en la UE aumentaron un 54% y los alquileres un 26%, según datos de Eurostat. Estonia y Lituania registraron los mayores aumentos en ambos aspectos en todo el bloque, mientras que Italia fue el único país donde se observó una caída en los precios de la vivienda y Grecia el único país donde los alquileres bajaron.
Según el portal inmobiliario español Idealista, los precios del alquiler en España aumentaron un 11,5% en 2024, alcanzando un máximo histórico en diciembre con una media de 13,5 € por metro cuadrado.
Quique Villalobos, portavoz de Urbanismo y Vivienda de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Madrid, explicó que en la capital “en sólo un año el precio de la vivienda ha subido un 20% en la compra y un 15,4% en el alquiler”.
Este fenómeno es especialmente notorio en grandes ciudades como Madrid, Barcelona y Valencia, impulsado por una combinación de presión demográfica y auge turístico.
En Madrid, el centro de la ciudad ha experimentado un aumento del 21% en los alquileres en un año, y los precios rara vez bajan de los 2.000 € al mes, según Villalobos. En los municipios del área metropolitana, se exigen alquileres de entre 1.200 € y 1.500 € para viviendas de tres habitaciones, añadió.
En Barcelona el panorama es similar, siendo el auge de los pisos turísticos un factor clave.
Los jóvenes son los más afectados
De media, los jóvenes de la UE abandonan el hogar paterno a los 26,3 años, según Eurostat. España tiene la cuarta edad media más alta del bloque, con 30,4 años.
La vivienda explica el 70 % de la desigualdad en este país», declaró a Euronews Víctor Camino, diputado del Partido Socialista Obrero Español (PSOE). Miles de jóvenes pagan hasta el 70 % de su salario en el alquiler o la compra de una vivienda.
Paula de las Heras, diputada del Partido Popular (PP) en la Asamblea de Madrid, dijo que los jóvenes llevan una década atravesando momentos económicos difíciles.
“Tienen poca capacidad de ahorro, los salarios no suben”, afirmó. Para acceder a la vivienda, se requiere una inversión inicial de entre 20.000 y 40.000 euros, algo inalcanzable para muchos.
En España, las posiciones políticas divergen
El gobierno central de España, liderado por el PSOE, se ha comprometido a aplicar la nueva Ley de Vivienda del país, que incluye medidas como topes al alquiler en las zonas más afectadas.
Camino recordó que en Cataluña los alquileres han bajado pero en Madrid han subido, y criticó a la ciudad por no aplicar la legislación.
De las Heras defendió la estrategia de Madrid y dijo que la ciudad estaba apoyando planes para construir miles de viviendas de alquiler asequibles y ayudar a los jóvenes a acceder a la vivienda.
La clave es aumentar la oferta de vivienda pública, según Villalobos, que pidió que ésta alcance el 9% del total de viviendas en Madrid, desde el 1% actual.
“Necesitamos invertir entre el 2% y el 3% del PIB”, dijo, añadiendo que las viviendas vacías deberían ser gravadas y los desalojos sin alternativas deberían ser prohibidos.
La solución a la vivienda es un problema multifacético.
Un desafío compartido
La crisis de la vivienda trasciende fronteras y refleja un problema estructural en toda la UE.
El bloque ha tomado algunas medidas para abordar esta crisis. En 2021, el Parlamento Europeo aprobó una resolución que reconoce la vivienda adecuada como un derecho humano fundamental.
En julio de 2024, Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, anunció que la vivienda sería una prioridad, con la creación de un comisario específico para este tema. En diciembre, se creó un comité especial para proponer soluciones en el plazo de un año.
Mientras las instituciones y los responsables de las políticas buscan respuestas, millones de ciudadanos, especialmente jóvenes, se enfrentan a un futuro incierto ante un mercado inmobiliario descontrolado.
En palabras de Camino, «no podemos permitir una sociedad dividida entre multipropietarios ricos e inquilinos pobres». La solución requiere voluntad política y acción coordinada, afirmó.