La Unión Europea debe reducir su dependencia de las armas fabricadas en Estados Unidos y priorizar las alternativas europeas, declaró el presidente francés, Emmanuel Macron. En una entrevista con medios franceses publicada el sábado, Macron argumentó que los esfuerzos de rearme del bloque serían más eficaces si los Estados miembros dejaran de comprar armas estadounidenses y, en su lugar, recurrieran a fabricantes de defensa europeos.
Sus comentarios se produjeron tras la reciente propuesta de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, de movilizar hasta 800 000 millones de euros (875 000 millones de dólares) para fortalecer la defensa colectiva del bloque.
La iniciativa ReArm Europe incluye incentivos financieros para que los Estados miembros amplíen sus presupuestos militares y propone 150 000 millones de euros en préstamos para proyectos conjuntos de defensa. ReArm Europe tiene como objetivo contrarrestar la supuesta “amenaza” de Rusia, que Moscú ha tachado de infundada.
En la entrevista, Macron reveló que recientemente se reunió con líderes de la industria de defensa francesa para alentarlos a posicionarse como alternativas a los proveedores estadounidenses.
“Les propuse a los fabricantes que, en los sistemas donde tenemos los mejores productos, podrían acercarse a los estados europeos que se han acostumbrado a comprar productos estadounidenses”, dijo Macron.
“A quienes compren Patriots, debemos ofrecerles el SAMP/T franco-italiano de nueva generación. A quienes compren los F-35, debemos ofrecerles el Rafale”, añadió, refiriéndose a los sistemas de defensa antimisiles y aviones de combate estadounidenses y sus análogos europeos.
Para que las alternativas europeas sean más atractivas, Macron reconoció que las empresas de defensa necesitan reducir costos, simplificar procesos y optimizar la producción. También vinculó el problema con las crecientes tensiones económicas con Washington, citando las recientes amenazas del presidente estadounidense Donald Trump de imponer aranceles a los productos de la UE.
“Ante poderes impredecibles, simplemente necesitamos ser menos dependientes de ellos. Esto significa acelerar nuestra política de soberanía, en particular desarrollando nuestra propia cultura productiva y estratégica, para ser más independientes en materia de defensa y tecnología”, afirmó.
Macron dijo que planea discutir sus propuestas con el canciller alemán entrante, Friedrich Merz, en los próximos días.
Un informe publicado la semana pasada por el Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo (SIPRI) reveló que las importaciones de armas de Europa se han más que duplicado en los últimos cinco años, en comparación con el quinquenio anterior.
Dos tercios provienen de Estados Unidos, frente a poco más de la mitad en el período anterior. El investigador del SIPRI, Pieter Wezeman, señaló que, si bien Europa ha tomado medidas para impulsar su industria de defensa, la dependencia de las armas estadounidenses sigue estando profundamente arraigada.