Cuando decimos Kaláshnikov solemos referirnos al fusil de asalto AK-47, unas de las armas más famosas del mundo. Se nos olvida que antes del artefacto estuvo su creador, Mijaíl Kaláshnikov, que le da nombre, porque fue este ingeniero militar quien lo diseñó en 1947.
Hoy este fabricante, que luce el nombre de aquel diseñador, produce muchas más armas que el popular fusil. De hecho, Kaláshnikov es el mayor fabricante de armas de Rusia.
Fundada en 1807 por decreto del zar Alejandro I de Rusia (entonces con el nombre de Izhmash), la Corporación Kaláshnikov es hoy una de las más grandes industrias en su campo. La compañía fabrica misiles, cañones, municiones de artillería dirigidas, coches y motocicletas. En su porfolio también hay drones, el arma de nuestros días (como ha mostrado la guerra de Ucrania, la invasión rusa de ese país).
Kaláshnikov fabrica dos modelos de dron de uso militar: el KUB-E y su evolución, el KUB-10E. El consorcio acaba de anunciar un “aumento significativo” de la producción para este año de drones kamikaze de potencia ampliada. Ya lo hizo en 2024, cuando incrementó en diez veces la producción de estos sistemas aéreos no tripulados, utilizados en la guerra de Ucrania.
No sólo los ha adquirido el Ejército de Vladimir Putin. Cuenta el fabricante que en 2024 firmó el “primer contrato de suministros de drones kamikaze KUB-E al extranjero”. Esas ventas a otros países se deben, según Kaláshnikov, a que su dron kamikaze demostró “su valía en la operación militar especial (así llaman en Rusia a la invasión de Ucrania) y en los combates en la zona fronteriza de Kursk”.
Este tipo de dron kamikaze está diseñado para destruir objetos terrestres no blindados, individuales o en grupo, según describe la corporación. El KUB-E hace su trabajo en base a coordenadas establecidas en tiempo real.
Puede ser utilizado tanto de día como de noche y con ráfagas de viento de hasta 10 metros por segundo. Los KUB pueden operar tanto en solitario como en grupo.
Para destruir el objetivo el sistema utiliza guiado según coordenadas especificadas con la capacidad de atacar con uno o más portadores de munición. La unidad de control del sistema permite recibir y transmitir órdenes de control en tiempo real.
Características del KUB-E
Dron kamikaze ruso, KUB-E.Kaláshnikov
Dimensiones: 1210 х 950 х 165 mm
Peso máximo al despegue: 8 kg
Altitud de vuelo: 150-1000 m
Velocidad: 80/130 km/h
Radio de acción (autonomía): 25 km
Resistencia: 30 min
Sistema de puntería: ataque en coordenadas GNSS predeterminadas
Tipo de ojiva: explosión/fragmentación
Tiempo de preparación: 30 min
Tiempo de desmontaje: 10 min
KUB-10E, la evolución
Dron ruso KUB-10E.Kaláshnikov
Kaláshnikov también fabrica el modelo KUB-10E. Se trata, dice el consorcio, de “una mejora significativa con respecto a sus predecesores de la serie en términos de alcance y potencia”.
Según el fabricante, el KUB-10E es capaz de atacar vehículos ligeros y vehículos blindados de transporte de tropas. También puede destruir puestos de mando, sistemas de defensa antimisiles y antiaéreos, emplazamientos de vigilancia e interferencia de comunicaciones, instalaciones logísticas, así como aviones y helicópteros no protegidos.
Esta munición guiada lanzada por catapulta puede utilizarse a cualquier hora del día o de la noche, así como en condiciones meteorológicas adversas. Este dron soporta ráfagas de viento de hasta 15 metros por segundo.
Drones espía y otros modelos
Granat-4, un dron espía ruso que ha sido utilizado en la guerra de Ucrania.Kaláshnikov
Kaláshnikov fabrica otros sistemas aéreos no tripulados de uso no militar. Son los modelos:
Quazimachta
SKAT 350M
Granat-4-E
Goliath-RU
Karakurt-R
Legioner G29s
Legioner E29
Alfa-E
El Granat-4 es un dron espía que también ha sido utilizado por las fuerzas rusas en el campo de batalla ucraniano. Tiene un alcance de hasta 100 kilómetros y puede mantenerse en vuelo hasta 6 horas.
Según dijo Putin en octubre pasado, para 2030 en Rusia se crearán 48 centros de diseño y producción de drones en diferentes regiones del país. El país destinará durante el próximo trienio 6 billones de rublos (unos 57.000 millones de euros) al desarrollo aeronáutico, naval y electrónico, según los planes del Ministerio de Finanzas.