El líder de la CDU, Friedrich Merz, ha revelado planes para un nuevo fondo especial de 500.000 millones de euros destinado a impulsar el gasto en infraestructura y defensa.
Poco más de una semana después de su victoria en las elecciones federales, Merz anunció que su Unión Demócrata Cristiana (CDU), junto con su partido hermano bávaro (CSU) y probable socio de coalición, los socialdemócratas (SPD), presentarán un proyecto de ley conjunto en el Parlamento la próxima semana para aliviar el freno de la deuda del país.
“Quiero decir muy claramente que, en vista de las amenazas a nuestra libertad y paz en nuestro continente, nuestra defensa debe aplicar ahora ‘lo que sea necesario'”, dijo Merz, hablando junto a los líderes de los partidos SPD y CSU en una conferencia de prensa en Berlín el martes.
“El gasto adicional en defensa sólo se podrá afrontar si nuestra economía vuelve a un crecimiento estable en un plazo muy breve… Esto requiere inversiones rápidas y sostenibles en nuestra infraestructura”, añadió.
Modificación de la ‘Ley Fundamental’
Los proyectos de ley necesitan una mayoría de dos tercios en el Parlamento para aprobarse, lo que significa que Merz debe volver a convocar al Bundestag saliente, elegido en 2021, y obtener el respaldo de los Verdes.
Esto supone un cambio significativo con respecto a la postura históricamente conservadora de Alemania respecto del endeudamiento público. En 2009, Berlín consagró el freno de la deuda en su constitución, que restringe el endeudamiento gubernamental y fija el déficit estructural en un máximo del 0,35% del PIB.
Aunque Merz no había anunciado tal decisión durante la campaña electoral, la CDU/CSU ahora la defiende a la luz de los recientes acontecimientos políticos mundiales, incluido el tenso enfrentamiento entre el presidente estadounidense Donald Trump y el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy en Washington.
“Alemania y Europa deben reforzar rápidamente sus capacidades de defensa. La CDU , la CSU y el SPD presentarán una moción para modificar la Ley Fundamental, de modo que los gastos de defensa superiores al 1% del PIB queden exentos del freno de la deuda”, afirmó Merz en la rueda de prensa.
El líder del SPD, Lars Klingbeil, destacó que no sólo se invertirá en las fuerzas armadas alemanas, sino también en un importante programa de financiación para escuelas, guarderías e infraestructuras.
“Este país ha estado funcionando sin recursos en muchas áreas, pero eso ya es cosa del pasado”, dijo Klingbeil.
Respuesta al anuncio del acuerdo
La líder del grupo parlamentario de los Verdes, Katharina Dröge, criticó a Merz por no haber entablado un diálogo con su partido antes de hacer el anuncio, señalando que la CDU/CSU podría haber discutido sus planes con los Verdes con antelación para asegurar la mayoría necesaria para aprobar el fondo especial en el recién elegido Bundestag.
Merz también ha enfrentado algunas críticas por no delinear sus planes fiscales durante su campaña electoral federal.
“La defensa está prácticamente exenta del freno de la deuda, ya que se han asignado 500.000 millones de euros adicionales a proyectos especiales de infraestructura y se ha aumentado la deuda en los presupuestos estatales. Esto es una cuestión de política estatal”, afirma Robin Alexander, redactor jefe adjunto del periódico alemán WELT.
“Pero también es cierto que esto coincide más con lo que propusieron Scholz y Habeck durante la campaña electoral que con el enfoque que Merz defendió durante la campaña electoral para el Bundestag”, añade.
En el mismo sentido se expresa el periodista del periódico alemán Spiegel Markus Feldenkirchen: “El acuerdo entre la CDU/CSU y el SPD sobre la futura financiación de la política es responsable. Lo que el partido de la futura canciller propuso en materia de financiación durante la campaña electoral fue totalmente irresponsable. Fue claramente un engaño deliberado”.