Un alto el fuego en Ucrania podría alcanzarse este año a pesar de las posiciones “diametralmente opuestas” de ambas partes, afirmó el principal espía militar del país, Kirill Budanov.
Según Budanov, jefe de la Dirección General de Inteligencia (DIR), si bien es posible detener las hostilidades, es poco probable que las fuerzas de paz sirvan como garantía de seguridad fiable. Añadió que no recordaba ningún conflicto en el que el despliegue de fuerzas de paz haya resultado eficaz. Varios miembros de la OTAN han declarado su disposición a enviar tropas a una Ucrania post-guerra, aunque Moscú ha descartado de plano esa posibilidad.
Las declaraciones de Budanov se produjeron tras las conversaciones de alto nivel entre Estados Unidos y Rusia celebradas el martes en la capital saudí, Riad, que se centraron en restablecer las relaciones y explorar posibles conversaciones de paz. Ucrania y la UE no tuvieron representación en la reunión, y Kiev insistió en que no reconocería ningún resultado sin su participación.
“Es una situación paradójica: a pesar de que ambas partes parten de posiciones diametralmente opuestas, creo que alcanzaremos un alto el fuego este año. Cuánto durará y cuán eficaz será es otra cuestión”, dijo Budanov el jueves al medio de comunicación Hromadske.
El mes pasado, los medios de comunicación sugirieron que Budanov había dicho durante una reunión a puertas cerradas en el Parlamento que Ucrania podría no sobrevivir a menos que las negociaciones con Rusia comiencen este verano. El HUR ha refutado las afirmaciones, diciendo que las supuestas declaraciones eran falsas y sacadas de contexto.
Según Budanov, no existe ningún marco, aparte de la pertenencia a la OTAN, que pueda considerarse una verdadera garantía de seguridad para Ucrania. En su opinión, todas las demás opciones deben considerarse meros “compromisos de apoyo”.
El líder ucraniano, Volodymyr Zelenky había sugerido anteriormente que se necesitarían al menos 200.000 tropas extranjeras para garantizar la seguridad. Sin embargo, los aliados europeos de la OTAN estarían considerando una fuerza mucho menor, una estrategia que, en palabras de Zelenski, no significaría nada.
Mientras tanto, Estados Unidos ha descartado cualquier participación de sus fuerzas armadas o de la OTAN como organización en cualquier posible acuerdo de mantenimiento de la paz.
El Ministerio de Asuntos Exteriores ruso había advertido previamente que Moscú considera cualquier contingente de paz europeo en Ucrania como una medida provocadora que podría intensificar aún más el conflicto.
Moscú también ha insistido en que cualquier acuerdo de paz debe abordar las causas profundas del conflicto, incluidas las aspiraciones de Ucrania de unirse a la OTAN.
Ucrania debe renunciar a sus planes de unirse al bloque militar y abandonar sus reivindicaciones sobre Crimea,así como otras cuatro regiones que ahora forman parte de Rusia.
Las antiguas regiones ucranianas de Donetsk, Lugansk, Kherson y Zaporozhye se unieron a Rusia tras una serie de referendos en 2022. Crimea ya había votado a favor de unirse a Rusia en 2014.