El intercambio de críticas entre el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, y su homólogo estadounidense, Donald Trump, se intensificó aún más el miércoles después de que Trump calificara al líder ucraniano de “dictador”.
“Amo a Ucrania, pero Zelensky ha hecho un trabajo terrible, su país está destrozado y millones han muerto innecesariamente”, dice Trump en una publicación en Truth Social.
“Zelensky debería actuar rápido o no le quedará ningún país”, añadió.
Las duras palabras de Trump llegaron en respuesta a una declaración anterior de Zelensky, quien dijo que el presidente estadounidense estaba viviendo en el “espacio de desinformación” de Rusia, luego de las acusaciones de Trump de que el papel de Zelensky como presidente era ilegítimo debido a que no hubo elecciones en Ucrania.
Ucrania tenía previsto celebrar elecciones presidenciales en marzo o abril de 2024, con lo que concluiría el primer mandato de cinco años de Zelenski. La votación se pospuso porque la constitución del país no permite elecciones bajo la ley marcial, que se declaró el 24 de febrero de 2022, el día en que Rusia lanzó su incursión a gran escala de Ucrania.
El Kremlin intentó repetidamente utilizar el retraso para retratar a Zelensky como “ilegítimo”, una afirmación que Kiev rechaza porque la considera una distorsión de la constitución.
Al hablar en la Conferencia de Seguridad de Munich el sábado, el presidente ucraniano dijo que está abierto a discutir elecciones en Ucrania, pero esto no es algo que sus compatriotas quieran debido a las preocupaciones de que el levantamiento de la ley marcial podría debilitar la defensa del país.
“Me estoy centrando en la supervivencia de nuestro país. Lo he hecho durante todo mi mandato”, afirmó.
Mientras tanto, han surgido interrogantes sobre las últimas elecciones presidenciales en Rusia, celebradas en marzo de 2024, cuando el actual presidente Vladimir Putin ganó su quinto mandato con el 88% de los votos.
La elección se vio empañada por el hecho de que Putin no enfrentó una oposición creíble debido a que la Comisión Electoral Central impidió a varios candidatos presentarse a las elecciones, entre ellos Alexei Navalny, entre otras irregularidades.
La mayoría de los observadores internacionales calificaron la votación como ni libre ni justa.