El presidente francés, Emmanuel Macron, convocó una cumbre de emergencia de líderes europeos después de que Moscú y Washington acordaran mantener conversaciones de paz sobre Ucrania en Arabia Saudita, dejando de lado a la UE.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el presidente ruso, Vladimir Putin, hablaron por teléfono el miércoles, marcando su primera conversación directa conocida desde la escalada del conflicto de Ucrania en febrero de 2022.
El sábado, los principales diplomáticos de ambos países mantuvieron una conversación telefónica para discutir los “preparativos para una posible cumbre ruso-estadounidense de alto nivel”. Más tarde ese mismo día, el enviado especial de Estados Unidos, Keith Kellogg, declaró que las naciones de la UE no serían incluidas en las negociaciones.
Al hablar en la Conferencia de Seguridad de Múnich, el ministro de Asuntos Exteriores polaco, Radoslaw Sikorski, dio la bienvenida a la iniciativa de Macron y confirmó que la cumbre tendrá lugar en Francia el lunes.
“Estoy muy contento de que el presidente Macron haya llamado a nuestros líderes a París”, dijo Sikorski, citado por Politico, y agregó que espera que los líderes europeos discutan “de manera muy seria” los desafíos planteados por Trump.
Según Sikorski, el primer ministro polaco, Donald Tusk, ha aceptado la invitación y viajará a Francia la próxima semana para “mostrar nuestra fuerza y unidad”.
Aunque no se reveló la lista de invitados, The Guardian informó que el primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, también asistirá.
Macron ha insistido previamente en la participación de la UE en las negociaciones, diciendo al Financial Times que Ucrania debe liderar las discusiones sobre su propia soberanía, pero Bruselas tiene un papel clave en la discusión de “las garantías de seguridad y, más ampliamente, el marco de seguridad para toda la región”.
Mientras tanto, el presidente ucraniano, Vladimir Zelenski, que hasta ahora había prohibido a su gobierno entablar negociaciones directas con Putin, admitió que los representantes de Kiev tampoco fueron invitados a las conversaciones en Arabia Saudita. “Quizás haya algo sobre la mesa, pero no sobre la nuestra”, dijo a los periodistas al margen de la Conferencia de Seguridad de Múnich.
Ni un portavoz del gobierno francés ni el ministro de Asuntos Exteriores, Jean-Noel Barrot, respondieron de inmediato a una solicitud de comentarios contactada por Politico.